lunes, 30 de abril de 2007
Qué es un Insecto..?
Seis patas: Los insectos pertenecen al grupo de los hexápodos. Porque los insectos adultos tienen tres pares de patas, aunque no siempre del mismo tamaño. Los grillos lucen formidables patas traseras, en tanto las delanteras de ciertas mariposas son casi invisibles y apenas útiles.
Sin esqueleto: Los mamíferos, peces, aves y reptiles son “vertebrados”: tienen espina dorsal o columna vertebral. Los insectos, en cambio, no tienen un esqueleto interno o endoesqueleto. La parte de afuera –llamada tegumento- es una especie de “coraza” que sirve de protección y de sostén para sus músculos y demás. Es el exoesqueleto o esqueleto externo.
Tres partes: El cuerpo de los insectos adultos está conformado por tres partes principales: la cabeza, el tórax y el abdomen. El tamaño relativo de estas partes entre sí es muy variable.
Con alas: Muchos insectos han perdido la capacidad de volar, pero no las alas. Otros sí que las usan, como las moscas, que tienen un solo par desarrollado; o las libélulas, que portan dos. Las alas pueden tener escamas (como en las mariposas) o estar transformadas en un par de duros élitros más un par de alas membranosas (como en los escarabajos). También hay insectos directamente sin alas, entre ellos pulgas y piojos.
Antenas: La presencia de antenas es característica de los insectos. Les sirven como órganos del gusto, del olfato y del tacto, además de permitirles orientarse y conservar el equilibrio.
Pequeño tamaño: Comparados con los animales de sangre caliente, como aves y mamíferos, los insectos son en general diminutos. Miden pocos centímetros, o menos de un centímetro. Algunos son difíciles de distinguir a simple vista.
Los insectos pertenecen al numerosísimo grupo de los artrópodos, que se caracterizan por tener exoesqueleto quitinoso, el cuerpo segmentado y dividido en regiones y apéndice articulados. Son artrópodos pero no son insectos- las arañas, los escorpiones, los cangrejos y los ciempiés.
José Méndez
14.962.207
Insectos Útiles
Además de su sabida utilidad en el equilibrio ecológico, ya sea consumiendo la carroña, mejorando el suelo contribuyendo a la polinización, hay insectos que directamente producen sustancias útiles al hombre.
La miel, por supuesto. Pero también el propóleos. Y la jalea real. Y la cera, que se usa para hacer cremas y cosméticos y muchas otras cosas. Gracias, abejas.
De otros diversos insectos se obtienen muy apreciados colorantes naturales, ya sea que los hayan extraído de flores y plantas o producidos por su propio metabolismo.
Y la seda, por supuesto. La auténtica mariposa de la seda –Bombyx mori- es el único insecto completamente domesticado, que ya no existe en estado silvestre. Su proceso de domesticación empezó en China hace miles de años
Las larvas de esta mariposa comen hojas de morera. Cuando tienen que convertirse en crisálidas, tejen un grueso capullo, formado por un filamento único de unos 300 metros de largo, con el que se hila la mejor seda.
Hay otras mariposas grandes, estas sí silvestres, que producen capullos similares. Pero el hilo no es continuo, y la seda que se puede lograr es de inferior calidad.
Freddy José Nava
14.962.371
La Especie Dominante
En el Pasado
La clase Insectos se conoce desde el período Carbonífero, que comenzó hace 350 millones de años. De ese momento de la era Paleozoica quedan impresiones de libélulas gigantescas, de hasta 75 cm., seguramente el primer animal capaz de volar.
¿Cómo se produjeron esas impresiones? La libélula muerta quedó cubierta de barro blando, que al secarse la presionó y calcó su forma: cuando el barro se convirtió en piedra, quedó en ella una vívida imagen del animal desaparecido.
En la región del Báltico se han conservado insectos del Terciario admirablemente incluidos en gotas de ámbar (este hecho es clave en el argumento de la película Jurassic Park).
El proceso es así: el insecto ha quedado pegado y finalmente envuelto en la resina que brota de ciertas coníferas. Esa resina también se volvió fósil: es el ámbar. Los animales así incluidos se conservan perfectamente a lo largo de los tiempos geológicos, manteniendo su color, forma, tamaño y brillo. ¡Son muy fáciles de estudiar! Pero cuidado: si entran en contacto con el aire, se desintegran.
José Méndez
14.962.207
Los Insectos por Dentro
El cuerpo de los insectos está formado por tres regiones principales (llamadas tagmas) con funciones claramente diferenciadas.
La cabeza contiene los órganos sensoriales: las antenas, de diverso tipo pero siempre dos; y los ojos, que pueden ser simples, denominados ocelos y normalmente tres; o compuestos por varios o muchos ocelos: 7 en ciertas hormigas, 4.000 en mosquitos y 12.000 en mariposas.
También en la cabeza está el aparato bucal, sea masticador (el más primitivo), picador-chupador (mosquitos, chinches, piojos), lamedor (abejas) tipo esponja (moscas), tipo sifón o espiritrompa (mariposas), etcétera.
El segundo tagma, el tórax, es el centro de la locomoción, porque lleva las seis patas (cada una articulada en varios segmentos) y las dos o cuatro alas, a veces útiles y a veces no.
Cuando esas alas están algo más endurecidas que en otros grupos, se llaman tegminas. Tegminas tienen los grillos, las langostas, las cucarachas. Cuando las alas están totalmente endurecidas, quitinizadas, se denominan élitros, y quienes los portan son los escarabajos.
El abdomen, finalmente, es el centro de la reproducción. Los insectos presentan sexos separados y muy diferenciados morfológicamente. En su gran mayoría son ovíparos; vale decir, se reproducen mediante los huevos que ponen sus hembras.
Freddy José Nava
14.962.371
Vida de Insectos
Alimentación
Se podría decir abiertamente que los insectos comen de todo. Aunque tratándose de tres cuartos de millón de especies, eso no debería asombrarnos.
Los jugos de las plantas y también sus hojas y sus tallos y sus raíces; frutas, las que sean; granos de cereales; carne viva o muerta, fresca o en descomposición; madera, papel, telas; sangre (incluida la humana): todo puede ser alimento.
Hay que decir que muchos insectos devoran... a otros insectos. Así, las ninfas de las libélulas o las chinches de agua se alimentan de insectos que andan por allí (y también de pequeños vertebrados acuáticos, como pececitos y renacuajos). Las mariquitas, también llamadas vaquitas de San Antonio, tienen una dieta a base de los pulgones que comen rosales y otras plantas. Por eso las rondan. Incluso se las cría adrede para cuidar el jardín. O sea que no solamente traen buena suerte...
Algunos insectos –como las moscas comunes- no son muy exquisitas al escoger su menú. Lo mismo les da succionar azúcar o frutas que sudor o excrementos.
Otros, en cambio, parecen saber lo que quieren. Tanto, que se los reconoce y denomina por su alimento predilecto, como la chinche de la malva o el escarabajo de la harina o el piojo de los libros. Otro que se devora los libros es el conocido tisanuro o pescadito de plata.
La mayoría de los insectos son herbívoros, y la mayoría de los herbívoros son especialistas. O sea: comen una sola o en todo caso unas pocas especies de plantas. ¿No sería mejor cualquiera? ¿No tendrían así más alimento disponible? No, ellos siguen con su aburrida dieta. ¿Por qué?
El fenómeno admite diversas explicaciones, tal vez complementarias. Ingenuamente se podría pensar: comen esa planta porque les gusta más, porque les atrae más su sabor o su color o lo que sea. Pero no es tan simple.
Una razón posible es que las plantas contienen sustancias defensivas, suerte de venenos para hongos y para insectos. Los insectos, por su parte, han debido desarrollar a su vez mecanismos defensivos contra esos venenos. Y, como sería imposible desarrollar esos mecanismos para diversos venenos, se han especializado en un determinado vegetal.
Otra explicación posible es que cada insecto ha elegido aquellas hojas que por algún motivo (tamaño, forma, color) lo protegen mejor o lo expone menos a sus depredadores naturales.
Insectos que Vuelan
Abejas
Miel, polen, propóleos y un ejemplo de organización social es lo que las abejas brindan generosamente al hombre.
La abeja común occidental es la Apis mellifera, originaria de Asia y Europa e introducida por españoles e ingleses en América. Vive en colonias permanentes, formadas por una reina (excepcionalmente dos), abejas obreras (entre 10.000 y 150.000) y entre 500 y 1.500 zánganos o machos. A diferencia de las hembras, estos no tienen aguijón.
Artificial o natural, la vivienda de las abejas se llama colmena. En su interior, las obreras construyen con cera los panales (formados por celdas con forma de prisma hexagonal) donde almacenan miel y polen para alimentar tanto a las larvas como a los insectos adultos.
La reina, se ocupa exclusivamente de poner huevos: eso sí, unos 3.000 por día. La función de los zánganos es la de fecundar a la abeja reina. Cuando uno lo logra, las obreras exterminan a todos. Una de las larvas, seleccionada y alimentada a jalea real, se convierte en reina.
Normalmente de cada colonia se desprenden todos los años uno o más enjambres –siempre conteniendo una reina- que se instala en otro lugar (siempre cerca de donde haya flores) y funda una nueva colonia. Así se propaga la especie.
Ficha técnica
Nombre vulgar: Abeja, abeja común, abeja occidental
Nombre científico: Apis mellifera
Tipo: Artrópodo
Clase: Insectos
Orden: Himenópteros
Familia: Ápidos
Distribución: Europa, Asia, América
Hábitat: Lugares con flores
Las abejas no son los únicos ápidos. Algunos abejorros también crean colonias, pero jamás tan numerosas. También hay abejas solitarias, como la llamada abeja carpintera, de gran tamaño, que construye sus nidos en las vigas de madera de los viejos edificios.
Las avispas, en cambio, pertenecen a otra familia: no son ápidos sino véspidos. También las hay sociales y solitarias. Y también pican, cuidado.
Animales vs. Insectos
Ya se sabe, por ejemplo, para qué tejen su tela las arañas...
Otro enemigo declarado lo constituyen, sin duda, las aves. Pájaros de especies muy diversas se alimentan principal o exclusivamente de insectos. Sus picos varían según el tipo de presa predilecta: finos y puntiagudos para rebuscar en el follaje, anchos y planos para cazar en vuelo, etcétera.
Entre las aves que son a la vez granívoras (es decir, que comen granos) e insectívoras están los canarios, los jilgueros, los pinzones. Las golondrinas y los vencejos son muy eficaces en la práctica de cazar insectos al vuelo.
Los batracios no se quedan atrás. Con su velocísima lengua retráctil, sapos y ranas ingieren una enorme cantidad de insectos cada noche. Camaleones y otros reptiles, incluyendo serpientes, tienen las mismas costumbres alimenticias. También los peces ingieren insectos, sea de los que viven en el agua, sean de los que accidentalmente caen allí.
¿Y los mamíferos? Topos, erizos, musarañas, murciélagos –entre otros- son también insectívoros, aunque no siempre en exclusiva. En cada caso, se lo permite su boca o su trompa.
Pero ninguna tan especializada como la del oso hormiguero (también llamado oso caballo por su gran tamaño), cuadrúpedo desdentado del área tropical de América del Sur. Su lengua cilíndrica parece una lombriz, pero está impregnada de una sustancia adherente. Su treta de cazador consiste en arañar la boca del hormiguero, haciendo ruido y estragos. Cuando las hormigas, alarmadas, corren a ver qué sucede... el oso hormiguero hace lo que su nombre le indica.
De modo que son insectívoros –además de muchos insectos y artrópodos- aves, peces, reptiles, mamíferos. Cuando se sume el hombre, los insectos pasarán a ser algo así como la dieta universal...
José Méndez
14.962.207
Insectos vs. el Hombre
Dos siglos atrás, ni médicos ni entomólogos imaginaban vínculo alguno entre insectos y enfermedades. Hoy se conocen centenares de afecciones, tanto del hombre como de los animales, difundidas por los insectos.
El paludismo o malaria es el ejemplo clásico. La enfermedad era conocida desde la antigüedad, lo mismo que su relación con los terrenos bajos y pantanosos. ¿Qué se suponía? Que el aire contaminado o miasma que por la noche se levantaba de los pantanos causaba la fiebre y los temblores característicos. Recién en 1882 alguien sugirió que el paludismo era transmitido por mosquitos, pero no le creyeron. Década y media después, se pudo comprobar.
Un mosquito, el famoso Anopheles, era quien transportaba los parásitos de la malaria. Excluyendo guerras y accidentes, se calcula que la malaria (y por tanto, su mosquito) ha sido responsable de la mitad de las muertes humanas desde la Prehistoria.
La famosa peste bubónica –cuyas apariciones diezmaron repetidamente a Europa- se relacionaba con las ratas, pero ahora se sabe que se trataba en realidad de la pulga Xenopsylla cheopis que sí infesta a las ratas.
La enfermedad del sueño, característica de África Central y antiguamente conocida como “el letargo negro” es transmitida por dos especies de moscas conocidas como tse tse.
La vinchuca, una chinche de gran tamaño, no se limita a provocar dolorosas picaduras. El parásito que ocasiona el Mal de Chagas-Mazza, una enfermedad silenciosa y luego crónica que afecta a zonas pobres de América Latina, es transmitido por este temible insecto. ¿De qué modo? La vinchuca defeca mientras come, dejando sus excrementos sobre la piel de la persona picada. Como la saliva de la vinchuca produce ardor, la persona se rasca, lacerando la piel y permitiendo así que el parásito penetre.
Sin ir más lejos, la mosca doméstica, aunque no es chupadora de sangre, lleva bacterias en sus patas, porque también se nutre de excrementos. Cuando luego se posa sobre alimentos humanos, puede transmitir disentería y otros desórdenes digestivos.
José Méndez
14.962.207
Las hormigas, insecto himenóptero de los trópicos y zonas templadas
viernes, 27 de abril de 2007
Descubren nuevas especies de insectos bajo una fábrica de cemento en Israel
La cueva, de unos 2,5 kilómetros de largo y unos 100 metros de profundidad, data de hace millones de años y en ella se ha descubierto un pseudo-escorpión y cuatro tipos de crustáceos.
Hanán Diamantman, biólogo de la Universidad Hebrea, aseguró que "las nuevas especies halladas son desconocidas para la ciencia". Y los análisis de ADN demuestran características genéticas muy exclusivas que responden al aislamiento del ecosistema durante millones de años.
La cueva se encuentra en una zona de piedra caliza que en tiempos prehistóricos estuvo cubierta por el mar Mediterráneo, y que al retirarse el agua salada, la lluvia creó en su interior espectaculares cuevas, entre ellas una repleta de estalactitas y estalagmitas hallada en la década de los cincuenta.
Descubren nuevas especies de insectos bajo una fábrica de cemento en Israel
La cueva, de unos 2,5 kilómetros de largo y unos 100 metros de profundidad, data de hace millones de años y en ella se ha descubierto un pseudo-escorpión y cuatro tipos de crustáceos.
Hanán Diamantman, biólogo de la Universidad Hebrea, aseguró que "las nuevas especies halladas son desconocidas para la ciencia". Y los análisis de ADN demuestran características genéticas muy exclusivas que responden al aislamiento del ecosistema durante millones de años.
La cueva se encuentra en una zona de piedra caliza que en tiempos prehistóricos estuvo cubierta por el mar Mediterráneo, y que al retirarse el agua salada, la lluvia creó en su interior espectaculares cuevas, entre ellas una repleta de estalactitas y estalagmitas hallada en la década de los cincuenta.
jueves, 26 de abril de 2007
NEOMAR BUITRAGO
Abdomen
El abdomen de los insectos está compuesto de 9 a 11 segmentos muy definidos; cuando existe el segmento undécimo está reducido a un par de cercos (apéndices presentes en el segmento posterior). En todos los casos, la abertura anal se encuentra en el último segmento. El abdomen no tiene patas; sin embargo, muchas larvas tienen varios apéndices en forma de patas llamados patas abdominales. En los insectos hembra contiene un órgano para poner los huevos (u ovopositor) que puede modificarse en forma de aguijón, sierra o taladro para efectuar la puesta en los tejidos internos de plantas o animales. Los órganos sexuales de los insectos surgen a partir de los segmentos abdominales octavo y noveno. Los insectos tienen esqueleto externo. Este exoesqueleto es un tegumento duro formado por el endurecimiento de la capa exterior del cuerpo por impregnación con pigmentos y polimerización de proteínas, proceso conocido como esclerotización. El esqueleto no se esclerotiza en las articulaciones, por lo que permanece flexible.
martes, 24 de abril de 2007
la introduccion
INTRODUCCIÓN
Insecto, nombre común de cualquier animal perteneciente a la clase Insecta del filo Artrópodos. Los insectos componen la mayor clase del mundo animal, ganando en número a todos los demás animales. Se han descrito al menos 900.000 especies, y los entomólogos creen que quedan por descubrir otras tantas o más. La clase está distribuida por todo el mundo, desde las regiones polares hasta los trópicos, y engloba especies que viven en tierra firme, agua dulce y salada, en lagos de agua salada y aguas termales. No obstante, los insectos alcanzan un número y variedad máximos en los trópicos. En lo que se refiere a su tamaño, exhiben también grandes variaciones. Algunos insectos parásitos pequeños miden menos de 0,25 Mm. de longitud, mientras que se sabe que al menos una especie fósil emparentada con las actuales libélulas, tenía una envergadura de más de 60 cm. Los insectos más grandes de nuestros días son algunos insectos palo, que miden unos 30 cm. de longitud y ciertas polillas que tienen envergaduras de alrededor de 30 centímetros.
Los insectos son la clase más desarrollada de los invertebrados, a excepción de algunos moluscos. Los insectos como las abejas, las hormigas y los termes (termitas o comejenes) tienen complejas estructuras sociales en las que las diversas actividades necesarias para la alimentación, el abrigo y la reproducción de la colonia se reparten entre individuos adaptados para desempeñarlas. Además, la mayoría de los insectos alcanzan la madurez a través de la metamorfosis, en lugar del crecimiento directo. En la mayoría de las especies, el individuo atraviesa al menos dos fases distintas antes de alcanzar la forma adulta.
LOS OJOS
Los ojos se pueden considerar como un tipo de sistema fotorreceptor, ya que, al fin y al cabo, eso es lo que hacen, captar la luz recibida. Básicamente, nos podemos encontrar con tres sistemas fotorreceptores.
1) Receptores dérmicos: no se trata de receptores localizados, sino que toda la cutícula aparece como sensible a la luz. Esto se ha comprobado en larvas de Lepidópteros, en Peri planeta y en larvas de Tenebrio.
2) Ocelos: también denominados ojos simples por el hecho de estar formados por una única ommatidia. Aparecen en la mayoría de los insectos. En la se pueden apreciar los ocelos (en la típica disposición de triángulo) del díptero Drosophila melanogaster, tal y como se ven al microscopio electrónico de barrido (para hacerse una idea del tamaño real, la barrita blanca mide 10 micras).
3) Ojos compuestos: están formados por una cantidad variable de ommatidias, que puede ir desde 1 en la obrera de la hormiga Ponera punctatissima hasta los cerca de 30.000 que presentan algunas especies de libélulas.
Mandíbulas indudablemente ha de haber una gran variedad, no puede ser igual la que emplee una mariposa para libar el néctar de las flores que la que emplee un mosquito (mosquita más bien) para succionar la sangre.
En general, las mandíbulas de los insectos se llaman de formas distintas dependiendo de la función que hagan, a saber:
1. trompa chupadora (moscas)
2. probóscide chupadora (mariposas)
3. probóscide perforante (chinches)
4. probóscide lamedora (abejas)
5. tubo succionador (mosquitos)
En algunos casos, la forma de las mandíbulas es típica de un orden, pero puede haber más de un tipo de mandíbula por cada orden.
En las antenas están los sentidos del tacto y del olfato de los insectos. Por lo general los insectos poseen dos antenas, excepción hecha de aquellos individuos que por ser inmaduros o por haber sufrido algún accidente carecen de una o incluso de los dos apéndices antedichos. Como ocurre en casi cualquier otro órgano de los insectos, existen numerosas adaptaciones y variantes, incluso dentro de la misma especie (en numerosos casos, se da un diformismo sexual consistente en que el macho presenta unas antenas plumosas (o más plumosas) que las hembras, y que les sirven para localizar a estas por el rastro de feromonas que emiten). En el dibujo de la página siguiente se puede observar la gran variación de este órgano existente entre las mariposas.
lunes, 23 de abril de 2007
Los artrópodos y su importancia en medicina humana
hombre, al ser atraídos hacia el huésped por el calor corporal,
la sudoración, el bióxido de carbono del aire exhalado, el olor
corporal, la microflora cutánea, la sobreinfección bacteriana
y ciertos colores en la vestimenta. Estos, entre otros factores
contribuyen a frecuentes mordeduras y picaduras que son
motivo de consulta en la práctica médica.
En este trabajo tratamos los principales artrópodos causantes
de problemas médicos en la República Mexicana. Se
hace referencia a las diferencias entre picaduras y mordeduras
de artrópodos, así como los principales problemas que
producen los artrópodos al hombre.
Palabras clave: Artrópodos, insectos, arácnidos, mosquitos,
moscas, arañas, garrapatas.
.
Los artrópodos, cuyo nombre deriva del hecho de que tienen
patas articuladas, son animales invertebrados que incluyen
una gran variedad de especies, clases y órdenes. Muchos
de ellos producen sustancias nocivas para la especie humana
que pueden ocasionar enfermedad y muerte, como el caso
del loxoscelismo y latrodectismo (enfermedades producidas
por los venenos de Loxoceles laeta o araña violonista y Latrodectus
mactans o araña capulina, así como la acción de los
venenos de Centruroides o alacranes, que con frecuencia producen
muerte, sobre todo en niños.1
Pero quizá el papel más importante que juegan los artrópodos
en la vida del hombre es como agentes transmisores de
bacterias, virus, protozoos y helmintos, muchos de los cuales
han sido y son problemas de primerísimo orden como productores
de enfermedad y muerte. Basta con mencionar los
estragos que han producido a la humanidad las epidemias de
peste (Yersinia pestis), tifo (Rickettsia prowazekii), fiebre
amarilla (YF virus), encefalitis por virus ARBO, paludismo
(Plasmodium sp.), entre otros.1- 8
Debe diferenciarse entre picadura y mordedura. La picadura
se define como la introducción en la piel de un apéndice
de un artrópodo, generalmente localizado en la parte anterior
del cuerpo, como en el caso de la probóscide de los dípteros
picadores y chupadores de sangre, o en la porción distal del
abdomen, cuyo fin es fundamentalmente defensivo (aguijón
de las abejas, avispas o del alacrán). Por el contrario, hablamos
de mordedura cuando la lesión cutánea es originada por
los apéndices localizados en la zona cefálica y que normalmente
son utilizados con fines agresivos (quelíceros de las
arañas con los que introducen veneno.9
Numerosas especies tienen importancia en medicina, ya
sea porque constituyen las causas directas de lesión, enfermedad
o molestias para el hombre o bien porque actúan como
transmisores de microorganismos patógenos.
Los artrópodos constituyen un grupo con un número de
especies e individuos tal, que superan a todos los demás grupos
del reino animal y vegetal juntos. Esto significa más de la
mitad de todas las especies vivas conocidas, y cerca de un
80% de todas las especies animales. Se conocen alrededor de
un millón de especies de artrópodos. Ecológicamente, son
animales que han conseguido un verdadero prodigio de adaptación.
Se caracterizan por una amplísima variación morfológica
y fisiológica; se han adaptado a todo tipo de alimentación
y habitan cualquier ambiente.
Clasificación de los artrópodos de mayor importancia
médica en la República Mexicana:
Insectos
Himenópteros: abejas, avispas, abejorros
Hemípteros: chinches
Dípteros: mosquito, tábano
Afanípteros: pulgas
Lepidópteros: orugas
Artículo original
Los artrópodos y su importancia en medicina humana
Leticia Calderón Romero,1 Jorge Tay,1 JT Sánchez Vega,1 Dora Ruiz Sánchez1
1 Laboratorio de Parasitología, Departamento de Microbiología y Parasitología, Facultad de Medicina, Universidad Nacional Autónoma de México.
mente partenogénesis (huevos que desarrollan individuos
hembra sin previa fecundación). En la metamorfosis posterior
se presentan diferentes variantes según el grupo de que
se trate 2,13.
Los insectos
• Tienen el cuerpo formado por anillos y recubierto de quitina
• Están divididos en tres partes: cabeza, tórax y abdomen
• En la cabeza tienen la boca, dos antenas y los ojos, simples
o compuestos
• En el tórax llevan seis patas articuladas y cuatro alas (algunos
sólo dos, y otros carecen de ellas)
• Respiran por unos tubos llamados tráqueas y son terrestres.
Los insectos actúan como vectores, o portadores de microorganismos,
principalmente en dos formas. Por transmisión
mecánica (arrastre mecánico de agentes infecciosos o
parasitarios como lo hacen las moscas o las cucarachas). Por
sus picaduras (como transmisores biológicos o por defecación).
De todos los insectos que transmiten enfermedades,
los mosquitos representan la mayor amenaza.
Los insectos son los únicos invertebrados con alas y los
únicos animales que tienen seis patas, por lo que también se
les denomina hexápodos. Es el grupo zoológico que tiene más
especies: del millón de especies animales conocidas, 800,000
son insectos. Se encuentran lo mismo en altas montañas que
en las casas costeras, tanto en los ríos y lagos como en los
desiertos. Sólo el mar ha resistido a su colonización.
Los insectos, como el resto de los artrópodos, tienen esqueleto
externo, formado por tres capas que de fuera a dentro
son: la cutícula, la epidermis y la membrana basal. La cutícula
es una capa dura, ligera e impermeable, que puede presentar
diferentes colores.
polisacárido: la quitina. Durante las mudas la cutícula vieja
es sustituida por otra nueva. Para permitir el movimiento, el
exoesqueleto dispone de articulaciones constituidas por unas
finas membranas o escleritos.
La cabeza está formada por varios segmentos fusionados.
En ella se distinguen los ojos, las antenas y las piezas bucales.
Los ojos pueden ser simples (ocelos) o compuestos, en
cuyo caso son dos y generalmente grandes; constituyen una
agrupación de omatidios (entre 10 y 20.000) cada uno de los
cuales funciona como un ojo independiente; por lo que las
imágenes que ve el insecto es como un mosaico compuesto
por los diferentes sectores que ve cada omatidio. Algunos
insectos son incapaces de ver el color rojo, aunque pueden
captar las radiaciones ultravioletas que para nosotros son invisibles.
Poseen dos antenas en la cabeza que pueden ser muy cortas
o muy largas y con muchos segmentos, superando en algunos
casos la longitud de su cuerpo. Poseen receptores del
sabor y del olfato, éste último muy desarrollado. Pueden presentar
varios tipos de aparatos bucales: los masticadores,
masticadores-lamedores, chupadores y picadores-chupadores.
El tórax está constituido por tres segmentos: el prototórax,
el mesotórax y el metatórax. En cada uno de estos tres segmentos
se insertan un par de patas. El tórax puede presentar
también expansiones laminares del tegumento que forman las
alas. En el prototórax nunca hay alas. Entre los insectos que
carecen de alas hay que distinguir los apterigógenos o insectos
primitivos, y los pterigógenos o insectos sin alas (pulgones
y piojos). Las venas de las alas es uno de los caracteres
más usados para la clasificación de los insectos.
El abdomen está constituido por once segmentos y, en
general, carece de apéndices. El segmento octavo y noveno
presentan los apéndices genitales o gonopodios. La respiración
es traqueal, y el sistema nervioso es ventral y formado
por múltiples ganglios en todos los insectos.
Los arácnidos
• Tienen el cuerpo dividido en cefalotórax con ojos simples
y abdomen
• Llevan quelíceros (uñas venenosas) y pedipalpos (dos palpos
junto a la boca)
• Tienen cuatro pares de patas, carecen de antenas
• Respiran por tráqueas especiales y son terrestres
El grupo zoológico de los arácnidos abarca las arañas, los
escorpiones, los opilones y los ácaros. Se definen como artrópodos
quelicerados, es decir provistos de un par de apéndices
terminados en una pinza, los quelíceros, y de respiración
aérea. Carecen de antenas, mandíbulas, alas y ojos compuestos;
sólo poseen ojos simples. Durante su desarrollo
realizan mudas, pero no metamorfosis. Muchos de ellos tienen
glándulas que segregan seda, con la que fabrican telas, y
glándulas secretoras de veneno con qué paralizar a sus presas.
Son carnívoros y se alimentan preferentemente de insectos.
En la actualidad se conocen unas 100,000 especies de arácnidos,
que fueron los primeros artrópodos que colonizaron el
medio terrestre. Los primeros restos de arácnidos son unos
antecesores de los escorpiones que se extinguieron hace 500
millones de años.
Las arañas presentan el cuerpo dividido en dos partes: el
cefalotórax o prosoma y el abdomen u opistosoma. Estas dos
regiones se unen mediante una estrecha cintura llamada pedicelo.
En el cefalotórax se encuentran un par de pedipalpos y
cuatro pares de patas marchadoras. El abdomen, al igual que
el cefalotórax no está segmentado. Las arañas presentan digestión
externa. Después de matar con el veneno a sus presas,
inyectan en ellas, a través del orificio abierto por los quelíceros,
el jugo digestivo y posteriormente absorben la papilla
resultante, dejando al insecto totalmente vacío. La
excreción se realiza mediante tubos de Malpighi. La respiración
se realiza mediante filotráqueas y tráqueas, que son una
especie de pulmones laminares dispuestos en una cámara llena
de hemolinfa donde se realiza el intercambio gaseoso.
Suelen vivir entre uno y dos años.
Los escorpiones tienen el cuerpo dividido en tres partes:
un cefalotórax, un preabdomen de 8 segmentos y un posabdomen
de 5 segmentos que forma una especie de cola acabada
en un telson (aguijón), en donde desemboca una glándula
venenosa. Los quelíceros son triarticulados y en forma de
pinza; los pedipalpos están muy desarrollados y acaban en
unas fuertes pinzas con las que sujetan a sus presas.
Los opiliones son parecidos a las arañas, pero, a diferencia
de ellas, carecen de cintura entre el prosoma y el opistosoma,
los quelíceros tienen forma de pinza y el opistosoma
está segmentado. Presentan unas patas muy largas y finas.
Tienen dos ojos grandes y un tubérculo cefálico. Tienen glándulas
secretoras de sustancias malolientes.
Los ácaros son arácnidos de pequeño tamaño y de abdomen
no segmentado y fusionado al cefalotórax. Los adultos
tienen cuatro pares de patas. Hay especies de vida libre, tanto
terrestres como acuáticas, y especies parásitas, tanto de animales
como de plantas. Pueden provocar grandes daños en
cosechas, graneros, alimentos (queso, jamón), o en animales.
Las garrapatas se alimentan mediante succión de sangre, por
lo que pueden transmitir enfermedades entre el ganado. A
este grupo pertenece el de la sarna, un ácaro que excava galerías
en la piel del hombre y de otros mamíferos.
Importancia médica de los artrópodos
1) Como transmisores de agentes infecciosos (virus, bacterias,
parásitos). Leticia Calderón Romero y cols. MG
2) Como agentes causales de enfermedades y molestias (pediculosis,
miasis, etc.)
3) Como causantes de diversas patologías debidas a sus productos
a través de mordedura, picadura o contacto (viuda
negra o capulina), cuyo veneno produce en el hombre el
latrodectismo, etc.
José Méndez
14.962.207
PLAGA DE CHINCHES
'Uno de los grandes misterios'; 'Monstruos invisibles que te torturan'; 'Una pesadilla, no puedes irte a dormir', son frases que no proceden de una película de terror en cartelera.Figuran en un vídeo en YouTube (youtube.com/watch?v=4qx751dNw7Q) sobre la plaga de chinches que de un tiempo a esta parte recorre Estados Unidos.Los insectos han sido compañeros de cama de la humanidad desde tiempos bíblicos pero hace unos 50 años, después de la Segunda Guerra Mundial, se les consideró erradicados en este país.Pero ahora, debido a factores como el incremento de los viajes por todo el mundo y al declive del uso del poderoso pero nocivo insecticida DDT, los hemípteros han reaparecido con una ímpetu y a una velocidad alarmante.Las compañías de control de plagas hablan de un incremento de infestaciones del 71 por ciento entre los años 2000 y 2005.En San Francisco (California), al parecer una de las ciudades preferidas no sólo de los turistas sino también de las chinches, las autoridades sanitarias recibieron más de 300 denuncias en 2006 -la mayoría de turistas de altos vuelos que tuvieron que compartir habitación con estos huéspedes-, más del doble que en 2004.'Ya no utilizamos químicos tan fuertes, no rociamos los colchones con insecticida antes de venderlos y los insectos se han vuelto cada vez más resistentes a los pocos productos que nos quedan', señaló Laura Krueger, del Departamento de Servicios de la Salud de California, al diario 'The San Francisco Chronicle'.Muchos visitantes afligidos acuden a Internet, en sitios como The Bedbug Resource (www.thebedbugresource.com) -con el lema 'cada plaga es una historia de terror para quienes lo padecen'-, para dar detalles sobre sus perturbadores encuentros y nombres de establecimientos hoteleros a fin de que sean incluidos en los registros en línea que ya existen al respecto.A la cabeza de páginas de Internet dedicadas a las chinches se encuentra bedbugger.com, una web para compartir trucos, colocar fotos de las fechorías o simplemente desahogarse de lo que muchos afligidos hartos de pasearse por las consultas de dermatólogos califican de 'experiencia traumática'.La cuestión es tan preocupante que algunos estados, como el de Nueva York, quieren aprobar leyes que prohíban la venta de colchones usados para cerrar el paso a estos pequeños 'chupasangre' del tamaño de una lenteja que pueden sobrevivir durante
variosmeses sin consumir alimento.Más allá de estas leyes, las autoridades sanitarias se ven impotentes ante una plaga que ya se ha extendido a las escuelas, donde los insectos viajan camuflados en la ropa y las mochilas de los niños.No es de extrañar, por tanto, que el tono de muchos cuadernos de bitácora en línea sea casi de guerra.Véase si no thebedbugwar.blogspot.com, subtitulado 'Es la guerra y yo la voy a ganar', del canadiense Mike David; waronbedbugs.blogspot.com o 'derrotamos a los chinches con una estrategia integrada'.Estos animales, que se activan de noche y viven hasta diez meses, infestan las casas escondiéndose en los alrededores de la cama o en los muebles cercanos.El problema es que, si se los deja estar, unos pocos individuos pueden crear una colonia de miles en tan sólo unas semanas.Los afectados indican que la única manera de librarse de ellos es contratar un servicio profesional de erradicación de plagas (que también se ofrece por Internet, como es el caso de www.pestworld.org).Otras medidas caseras a la desesperada, como lavar toda la ropa o dormir en el salón, no funcionan, ya que al parecer el bicho le persigue a uno allá donde que va.El servicio profesional cuesta unos 5.000 dólares como media por una sola casa, según los expertos. Así que las chinches no pican sólo en la piel, sino también en el bolsillo.
Br. Alfredo Contreras
C.I: 15.695.767
Sección: “B”
TIPOS DE ANTENAS DE LOS INSECTOS
LAMELADA
Las antenas pueden variar enormemente en forma y tamaño entre grupos de insectos, generalmente dado por modificaciones del flagelo. Por esto son útiles para identificar algunos grupos de insectos. Los tipos de antenas más comunes :
CAPITADA
Poseen los segmentos terminales expandidos lateralmente formando un lóbulo redondeado u oval. Ej: algunos coleópteros
plumosa
Largas y delgadas, pero con los segmentos terminales agrandados abruptamente formando una especie de cabeza. Ej: algunos lepidópteros.
ESTILADA
Compacta y con el último segmento con una protuberancia en forma de dedo. Ej: mosca ladrona.
GENICULADA O ACODADA
Con el escapo largo, y con el pedicelo corto que articula al flagelo en ángulos variables. Ej: microhymenópteros, curculionidos.
arisada
Compacta y con el último segmento agrandado que posee un pelo o arista. Ej: mosca domestica.
filiforme
Típicamente larga, cilíndrica y con todos los segmentos de tamaño uniforme. Ej: langostas
SETACEA
Pequeñas con apariencia de pelo, y con los segmentos más delgados hacia la punta. Ej: matapiojos, chicharras.
la metamorfosis de los insectos
Los insectos han maravillado al hombre desde tiempos inmemoriales. Son organismos fascinantes que nos sorprenden no sólo por su gran diversidad de formas, tamaños y coloridos, sino también por las adaptaciones morfológicas y fisiológicas que presentan para establecerse en diferentes hábitats y hacer frente a los cambios del medio. Esta "plasticidad" les permite también sobrevivir gracias al uso de diferentes estrategias, ya sean hábitos alimenticios o reproductivos, entre otros.
Una excelente estrategia que adoptaron los insectos para adaptarse mejor a diferentes medios es la metamorfosis, que es el cambio de forma a través de diferentes estadios durante la vida de los organismos. Los estadios por los que pasa el individuo durante la metamorfosis son: huevo, larva, pupa y adulto.
Algunas veces los cambios son muy pequeños y los especímenes jóvenes (estadio juvenil) son muy similares en forma a los adultos (estadio adulto), el cambio se da principalmente en el tamaño. A este fenómeno se le conoce como metamorfosis simple y se da, entre otros, en chinches y pulgones de las plantas.
En otros casos, los individuos jóvenes y los adultos son muy diferentes, tanto en forma como en tamaño y hábitos. Esto se conoce como metamorfosis completa y puede ser observado en las mariposas.
Metamorfosis simple
Los insectos que pasan por este fenómeno tienen individuos jóvenes -llamados ninfas- muy parecidos a los adultos. Si son organismos que poseen alas, éstas se desarrollan externamente durante los estadios inmaduros; no hay estadio de pupa antes de la última muda, en la cual el individuo alcanza su talla final.
Hay varios tipos de metamorfosis simple:
a) Ametábola ("sin" metamorfosis). Los insectos que presentan este tipo de desarrollo no tienen alas en su etapa adulta y la única diferencia entre la ninfa y el adulto es el tamaño. Ejemplos de organismos con este tipo de metamorfosis son los protura, los colémbola y los tisanuro.
b) Hemimetábola (con metamorfosis "incompleta"). Las ninfas son acuáticas o viven en las agallas de las plantas. Difieren considerablemente de los adultos. Organismos de este tipo son las libélulas Metamorfosis completa
Los insectos con este fenómeno tienen un estadio pupal o pupa antes de la última muda, en el cual el individuo no se mueve y tiene un cambio muy considerable hacia la forma adulta. Si presentan alas, éstas se desarrollan internamente durante los estadios inmaduros. Poseen estadios larvales o inmaduros completamente diferentes del estadio adulto y la mayoría de las veces viven en diferentes hábitats, poseyendo diferentes hábitos. A estos organismos se les conoce como holometábolos y, como ejemplo, podemos señalar a las mariposas.
Este mecanismo permite sortear condiciones adversas como el invierno o la sequía, entre otras, e implica la interacción de diferentes fenómenos y cambios en los individuos. Para comprender mejor cómo sucede la metamorfosis, veamos qué ocurre en el caso de la mariposa monarca.
Ésta (cuyo nombre científico es Danaus plexipus), ha sido muy admirada por el fenómeno de migración en el que participa, pues uno no puede imaginarse cómo puede soportar un viaje tan largo un insecto tan pequeño y frágil; se han desarrollado muchos estudios al respecto. Sin embargo, también son de sorprender todos los cambios fisiológicos y morfológicos que los individuos de esta especie sufren a lo largo de su vida.
Como todas las mariposas, la monarca pasa por todos los estadios que suponen una metamorfosis completa: huevo, larva, pupa y adulto.
A fin de prepararse para convertirse en pupa, la larva deja de comer y elimina lo que le haya quedado de alimento en su tracto digestivo. La pupa deja el último exoesqueleto viejo de larva y permanece inmóvil.
El animal posee un sistema endocrino muy complejo y el control de la metamorfosis es realizado principalmente por tres hormonas. La primera es la hormona cerebral, producida precisamente por las células neurosecretoras del cerebro, que estimula las glándulas de la muda. Estas glándulas secretan, a su vez, ecdisona, la segunda hormona, que promueve el crecimiento de la larva. Aunada a estas dos actúa la hormona juvenil, tercera hormona, cuyo trabajo es inhibir la metamorfosis. Una vez que la mariposa ha alcanzado el último estadio larval, se deja de producir ésta, para permitir a la ecdisona promover la formación de la pupa.
La pupa es aparentemente inactiva y no se alimenta. Sin embargo, a pesar de que no posee actividad visible, es cuando el animal realiza más actividad fisiológica y en ella se llevan a cabo cambios considerables.
En este momento se produce la histólisis, proceso en el que las estructuras de la larva se transforman en el material que se va a utilizar en el desarrollo de las estructuras adultas, y la histogénesis, proceso en el que se desarrollan las estructuras adultas.
Las fuentes principales de material para la histogénesis son la hemolinfa (que es el equivalente a la sangre humana), el cuerpo graso (órgano fuente de energía en los insectos) y el tejido histolizado (como los músculos de la larva). Las alas y las patas se desarrollan de la cutícula (la piel endurecida de todo insecto, o exoesqueleto, cuya composición es de quitina) de la larva. En el último estadio larvario estos tejidos se dedican a construir estructuras adultas que se manifiestan recién cuando el insecto pupa construye su crisálida. El resto de los órganos pueden ser conservados desde la larva o pueden ser reconstruidos a partir de las células regenerativas.
El cambio de los órganos internos durante la metamorfosis depende de la actividad de éstos durante los diferentes estadios. Así, el corazón, el sistema nervioso y el sistema traqueal cambian muy poco. Otros, que están presentes de manera rudimentaria en la larva o que no existen, se desarrollan en la pupa para presentarse en los individuos adultos; tal es el caso del aparato reproductor.La mariposa monarca tiene una pupa que por su coloración y estructura recibe el nombre de crisálida y que se encuentra generalmente
La crisálida es gruesa, de color verde pálido a verde azulado, con manchas doradas y negras, de forma oval (foto 4). Cuando se acerca la hora de que el adulto emerja, se obscurece y su cubierta permite ver a la mariposa, pudiéndose percibir el color naranja de sus alas en desarrollo (foto 5). El estadio de pupa tiene una duración aproximada de 15 días.
El adulto recién salido usualmente es de color pálido, sus alas son suaves y están plegadas. Después de un tiempo, que en la monarca es de aproximadamente 40 minutos, las alas se expanden, se endurecen y la coloración ha adquirido su tono final.
La vida de la mariposa adulta (foto 6) depende de la suerte que corra, es decir, si va a realizar migraciones, si es víctima de un depredador o de las condiciones climáticas, etc. Pero, a pesar de estas variaciones, se puede calcular que la duración del ciclo de vida completo de la monarca es de aproximadamente de 5 a 7 semanas.
Ventaja de la metamorfosis
Este fenómeno permite al animal vivir en ambientes completamente diferentes y, de alguna manera, colonizar diversos hábitats. Las larvas poseen un movimiento limitado ya que su trabajo es saciar su apetito lo que les permite acumular energía. Por el contrario, los adultos tienen una distribución muy amplia pues las alas les permiten movilizarse y desplazarse por un área mucho mayor.
También, como ya se mencionó, la metamorfosis permite al animal evadir situaciones adversas, aunque en la monarca no se presente actividad de diapausa, es decir, alargar el tiempo en determinado estadio, que por lo general es el de pupa, para sobrevivir hasta que las condiciones sean las adecuadas, cuyas ninfas son acuáticas y los individuos adultos son alados
aporte de :ivan fereira
domingo, 22 de abril de 2007
INSECTA
Los insectos (Insecta) son una clase de animales invertebrados, del filo de los artrópodos. La ciencia que estudia los insectos se denomina entomología. Familiarmente se llama insecto, ademas de los insectos propiamente dichos, a otros artrópodos terrestres como aracnidos y miriápodos.
Los insectos comprenden el grupo de animales más diverso de la Tierra, con más de 800.000 especies descritas, más que los otros grupos de animales juntos. Los insectos se pueden encontrar en casi todos los ambientes del planeta, aunque sólo un pequeño número de especies se ha adaptado a la vida en los océanos. Hay aproximadamente 5.000 especies de libélulas, 20.000 de saltamontes, 170.000 de mariposas y polillas, 120.000 de moscas, 82.000 de chinches verdaderos, 350.000 de escarabajos, y 110.000 especies de abejas y hormigas.
Muchas especies, aunque no todas, tienen alas en su fase adulta. Los artrópodos terrestres como los ciempiés, milpiés, escorpiones y arañas se confunden a menudo con los insectos debido a que tienen estructuras corporales similares, pero no lo son.
MORFOLOGIA
El cuerpo de los insectos está formado por tres regiones principales (tagmas): cabeza, tórax y abdomen:
Cabeza
La cabeza es la región anterior del cuerpo, en forma de cápsula, que contiene los ojos, antenas y piezas bucales. La forma de la cabeza varía considerablemente entre los insectos, pero en la mayoría de ellos es fuertemente esclerosada.
La cabeza de los insectos está subdividida por suturas en un número de escleritos más o menos diferenciados que varían diferentes grupos. Típicamente hay una sutura en forma de "Y" invertida, extendiéndose a lo largo de la parte dorsal y anterior de la cabeza, bifurcándose por encima del ocelo para formar dos suturas divergentes, las cuales se extienden hacia abajo en los lados anteriores de la cabeza. La parte dorsal de esta sutura (la base de la Y) es llamada sutura coronal y las dos ramas anteriores suturas frontales. Por otra parte, la cabeza de los insectos está constituida de una región preoral y de una región postoral. La región preoral contiene los ojos compuestos, ocelos, antenas y áreas faciales, incluido el labio superior, y la parte postoral contiene las mandíbulas, las maxilas y los labios.
Ojos
La mayoría de los insectos tienen un par de ojos compuestos relativamente grandes, localizados dorso-lateramente en la cabeza. La superficie de cada ojo compuesto está dividida en un cierto numero de áreas circulares o hexagonales llamadas facetas u ommatidios; cada faceta es una lente de una única unidad visual. En adición a los ojos compuestos, la mayoría de los insectos posee tres ojos simples u ocelos localizados en la parte superior de la cabeza, entre los ojos compuestos.
Antenas
Son apéndices móviles multiarticulados. Se presentan en número par en los insectos adultos y la mayoría de las larvas, formadas por un número variable de artejos denominados antenómeros o antenitas. La función de las antenas son eminentemente sensoriales, desempeñando varias funciones. La función táctil es la principal, gracias a los pelos táctiles que recubren casi todos los antenómeros; también desempeñan función olfativa, gracias proporcionadas por áreas olfativas en forma de placas cribadas de poros microscópicos distribuidas sobre la superficie de algunos antenómeros terminales. También poseen una función auditiva y a veces función prensora durante la cópula, al sujetar a la hembra. Están formadas por tres partes, siendo las dos primeras únicas y uniarticuladas y la tercera comprende un número variable de antenómeros y se denominan respectivamente: escapo, pedicelo y flagelo o funículo.
Piezas bucales
Son piezas móviles que se articulan en la parte inferior de la cabeza, destinadas a la alimentación; trituran, roen o mastican los alimentos sólidos o duros y absorben líquidos o semilíquidos. Las piezas bucales son las siguientes:
Labro, labio superior o labio simple. De forma variable con movimientos para arriba y para abajo, es la tapa de la boca, se articula con el clípeo . En su parte ventral o interna está localiza la epifaringe, que no es una pieza libre, está levemente esclerosada y se localiza en la parte interna y ventral del labro y su función es gustativa.
Mandíbulas. Son dos, simples, dispuestas lateralmente atrás del labio superior, articuladas, resistentes y esclerosadas. Su función es masticar, triturar o lacerar los alimentos. En algunos adultos pueden faltar siendo totalmente ausentes o vestigiales en la totalidad de los lepidópteros y Efemerópteros.
Maxilas. En número de dos, están situadas atrás de las mandíbulas. Articuladas en la parte lateral inferior a la cabeza, son piezas auxiliares durante la alimentación. La hipoferinge es una estructura saliente, localizada sobre el mentón con función gustativa. Se asemeja a la lengua.
Tipos principales de aparatos bucales
El aparato bucal de los insectos se ha ido modificando en varios grupos para adaptarse a la ingestión de diferentes tipos de alimentos y por diferentes métodos. Aquí se citan los tipos más diferenciados e interesantes, escogidos para ilustrar las diversas formas adoptadas por partes homólogas, y los diferentes usos a que pueden ser aplicadas. Existen muchos otros tipos, gran cantidad de los cuales representan estados intermedios entre algunos de los aquí citados.
Tipo masticador. En este tipo, los varios apéndices son esencialmente: las mandíbulas cortan y trituran los alimentos sólidos y las maxilas y el labio los empujan hacia el esófago. Son ejemplos comunes los ortópteros, los coleópteros y larvas de lepidópteros. El tipo masticador de aparato bucal es el más generalizado y a partir del mismo se han desarrollado los otros tipos. Este punto de vista se apoya en dos clases de pruebas importantes. En primer lugar, este aparato bucal es el más semejante en su estructura al de los miriápodos que son los parientes más cercanos de los insectos. En segundo lugar, el aparato bucal masticador se encuentra casi todos los órdenes de insectos generalizados como las cucarachas, langostas, escarabajos, etc.
Tipo cortador-chupador. El aparto bucal de este tipo se encuentra en los tábanos (Diptera Tabanidae) y algunos otros dípteros, las mandíbulas se presentan en forma de hojas afiladas y las maxilas en forma de largos estiletes sonda. Ambas cortan y desgarran el tegumento de los mamíferos, haciendo fluir la sangre de la herida. Esta sangre es recogida por la protuberancia esponjosa del labio y conducida al extremo de la hipofaringe. La hipo y la epifaringe se ajustan para formar un tubo a través del cual la sangre es aspirada hacia el esófago.
Tipo chupador. Un gran número de moscas no picadoras, entre ellas la mosca doméstica, tienen este tipo de aparato bucal adaptado solo para la ingestión de alimentos líquidos o fácilmente solubles en saliva. Este tipo es el más similar al cortador chupador, pero las mandíbulas y las maxilas no son funcionales, y las partes restantes forman una probóscide con un ápice en forma de esponja (labelo). Esta se introduce en los alimentos líquidos que son conducidos hacia el canal alimenticio por diminutos canales capilares existentes en la superficie del labelo. El canal alimenticio también está formado en este tipo por la trabazón alargada de la hipo y epifaringe que forman un tubo hacia el esófago. Ciertos alimentos sólidos como el azúcar, pueden comerlos las moscas con este aparato bucal. Arroja una gota de saliva, que disuelve el alimento y luego la solución es succionada hacia la boca en forma líquida.
Tipo masticador-lamedor. Otro tipo de aparato bucal adaptado a la absorción de líquidos se encuentra en las abejas y avispas, ejemplificado por la abeja común. Las mandíbulas y el labro son de tipo masticador y las emplean para sujetar las presas y para amasar la cera u otros tipos de materiales con que se construyen sus nidos. Las maxilas y el labio forman una serie de estructuras deprimidas y alargadas de las cuales una de ellas forma un órgano extensible acanalado. Este último se emplea como una sonda para llegar a los profundos nectarios las flores. Las otras lengüetas de las maxilas y el labio forman una serie de canales por los que desciende la saliva y asciende el alimento.
Tipo picador-chupador. El aparato bucal de muchos grupos de insectos está modificado para taladrar tejidos y chupar jugos. Entre ellos los hemípteros (pulgones, chinches, cochinillas, chicharritas), predadores de muchas clases, piojos y pulgas que chupan la sangre de mamíferos y aves. En este grupo, el labro, mandíbulas y maxilas son delgados y largos, y se reúnen para formar una delicada aguja hueca. El labio forma una vaina robusta que mantiene rígida esta aguja. La totalidad del órgano se llama pico. Para alimentarse, el insecto aprieta la totalidad del pico contra el hospedador, inserta de esta forma la aguja en el interior de los tejidos del mismo y chupa sus jugos a través de la aguja hasta el interior del esófago.
Tipo tubo de sifón. Los lepidópteros adultos se alimentan de néctar y otros alimentos líquidos. Estos son succionados por medio de una larga probóscide (espiritrompa) compuesta solamente por un tubo que desemboca en el esófago.
Tórax
El tórax es la región media del cuerpo y contiene las patas y las alas (en algunos insectos adultos no hay alas y en muchos insectos inmaduros y en algunos adultos no hay patas). El tórax está compuesto de tres segmentos, protórax, mesotórax, y metatórax, cada segmento torácico tiene típicamente tres pares de patas y las alas (cuando presentes), sitúense en el mesotórax y en el metatórax; si hubiera un solo par de alas, estarían situadas en el mesotórax; el protórax nunca tiene alas.
El tórax está unido a la cabeza por una región del cuello, membranosa, el cerviz. Hay generalmente uno o dos escleritos pequeños en cada lado del cuello, los cuales ligan la cabeza con el protórax.
Cada segmento torácico está compuesto de cuatro grupos de escleritos. El noto dorsalmente, las pleuras lateralmente y el esternón ventralmente. Cualquier esclerito torácico puede ser localizado en un segmento particular por el uso de prefijos apropiados: pro-, meso- y meta-. Por ejemplo, el noto del protórax es llamado Pronoto.
Los notos del mesotórax y metatórax están frecuentemente subdivididos por suturas en dos o más escleritos cada uno. La pleura es un segmento portador de alas, forma un proceso alar-pleural que sirve como sostén para el movimiento del ala.
En cada lado del tórax hay dos aberturas en forma de hendiduras, una entre el protórax y el mesotórax y la otra entre el meso y el metatórax. Estas son los estigmas, o sea las aberturas externas del sistema respiratorio.
Patas
Consisten típicamente en los segmentos siguientes:
Coxa, segmento basal
Trocánter, segmento pequeño, (raramente dos segmentos), siguiendo a la coxa
Fémur, primer segmento largo de la pata
Tibia, es el segmento largo de la pata
Tarsos, una serie de pequeños segmentos (tarsómeros) después de la tibia. El número de segmentos tarsales en los insectos diferentes varía de uno a cinco. El último segmento tarsal generalmente contiene un par de garras o uñas y frecuentemente uno o más estructuras en formas de almohada, entre o en la base de las uñas. Una almohada o lóbulo entre las uñas es generalmente llamada apolium y almohadas localizadas en la base de las uñas son llamadas pulvillos.
Alas
Las alas de los insectos son evaginaciones de la pared del cuerpo localizadas dorso-lateralmente entre los notos y las pleuras. La base del ala es membranosa, esto hace posible los movimientos del ala.
Las alas de los insectos varían en número, tamaño, forma, textura, nerviación, y en la posición en que son mantenidas en reposo. La mayoría de los insectos adultos tienen dos pares de alas, situadas en el meso y metatórax; algunos, como los dípteros, tienen un solo par (generalmente situado en el mesotórax) y algunos no poseen alas (por ejemplo, formas ápteras de los pulgones, hormigas obreras, pulgas, etc.).
En la mayoría de los insectos las alas son membranosas y pueden contener pequeños pelos o escamas; en algunos insectos las alas anteriores son engrosadas, coriáceas o duras y en forma de vaina (coleópteros).
La mayoría de los insectos son capaces de doblar las alas sobre el abdomen cuando están en reposo, pero los grupos más primitivos, como libélulas y efímeras, no pueden hacerlo y mantienen las alas extendidas para afuera, o reunidas encima del cuerpo.
Algunos insectos como grillos y langostas machos, son capaces de producir un sonido característico con las alas producido friccionando las dos alas anteriores entre sí, o las alas anteriores con las patas posteriores.
Muchos insectos como las moscas y abejas, mueven las alas tan rápidamente que se produce un zumbido.
Abdomen
El abdomen de los insectos posee típicamente 11 segmentos, pero el último está muy reducido y representado por apéndices, de modo que el número de segmentos raramente parece ser más de 10. Los segmentos genitales pueden contener estructuras asociadas con las aberturas externas de los conductos genitales; en el macho estas estructuras se relacionan con la cópula y la transferencia de esperma a la hembra; y en las hembras están relacionados con la oviposición.
En la punta del abdomen puede haber apéndices, los cuales surgen del segmento 10 y son los cercos, que son de valor taxonómico.
Percepción
Muchos insectos poseen órganos muy refinados de percepción; en algunos casos sus sentidos pueden percibir cosas fuera del rango de percepcion de los sentdos de los humanos. Por ejemplo, las abejas pueden ver en el espectro ultravioleta y captar los patrones de polarización de la luz, y las polillas macho tienen un sentido especializado del olfato que los ayuda a detectar las feromonas de las hembras a muchos kilómetros de distancia, las hormigas pueden seguir en la oscuridad los rastros olorosos dejadas por sus compañeras.
Debido al pequeño tamaño y la simplicidad de su sistema nervioso, el procesamiento que puedan hacer de las percepciones es muy limitado. Por ejemplo, en general se acepta que la visión de los insectos ofrece muy baja resolución de los detalles. Especialmente a grandes distancias.
Por otra parte son capaces de dar respuestas sorprendentemente rápidas ante estímulos específicos. Por ejemplo el reflejo de correr de las cucarachas al percibir en sus cercos posteriores cualquier movimiento de aire que delata la presencia de un peligro a su alrededor, o el reflejo de las moscas durante el vuelo de esquivar obstáculos a alta velocidad.
Reproducción
Los insectos presentan sexos separados y frecuentemente muy diferenciados morfológicamente entre sí, siendo en algunos casos el macho más grande y de coloración más llamativa que la hembra. Se reproducen normalmente por vía sexual, en algunos casos también se pueden reproducir mediante partenogénesis (asexualmente), en algunas pocas especies no se conocen machos.
Los huevos pueden ser colocados solitarios o en grupos, a veces dentro de una estructura protectora llamada ooteca.
Metamorfosis
La metamorfosis es un proceso de desarrollo postembrionario, mediante el cual los insectos alcanzan su fase adulta (imago), durante la cual llegan a la madurez sexual y en los Pterigotos se desarrollan las alas. De acuerdo al tipo de metamorfosis que experimenta los insectos se clasifican en:
Ametábolos: los juveniles no se diferencian de los adultos salvo por la madurez sexual y el tamaño
Hemimetábolos: metamorfosis gradual en la cual las tecas alares y los órganos sexuales se van desarrollando poco a poco, si bien las diferentes fases juveniles son semejantes entre sí y el adulto, los cambios en la última muda son más marcados (e.g. aparición de alas.
Holometábolos: metamorfosis completa, en la cual los tejidos del adulto se originan a partir de grupos especiales de células llamadas imaginales, durante una fase del ciclo de vida conocida como pupa.
Taxonomía
Subclase: Apterygota
Órdenes
· Archaeognatha (=Microcoryphia)
· Thysanura
· Monura - extinto
Subclase: Pterygota
· Infraclase: Paleoptera
Órdenes
· Ephemeroptera (efímeras)
· Odonata (libélulas)
· Diaphanopteroidea - extinto
· Palaeodictyoptera - extinto
· Megasecoptera - extinto
· Archodonata - extinto
· Infraclase: Neoptera
Órdenes
· Blattodea (cucarachas)
· Isoptera (termitas)
· Mantodea (mantis)
· Dermaptera (tijeretas)
· Plecoptera (moscas de la piedra)
· Orthoptera (langostas y saltamontes)
· Phasmatodea (bichos palo)
· Embioptera
· Zoraptera
· Grylloblattodea
· Mantophasmatodea
· Superórden: Exopterygota
Órdenes
· Psocoptera (piojos de los libros)
· Thysanoptera
· Phthiraptera (piojos)
· Hemiptera (chinches)
· Superórden: Endopterygota
Órdenes
· Raphidioptera
· Megaloptera
· Neuroptera (hormigas león)
· Coleoptera (escarabajos)
· Strepsiptera
· Mecoptera (moscas escorpión)
· Siphonaptera (pulgas)
· Diptera (moscas)
· Trichoptera
· Lepidoptera (mariposas y polillas)
· Hymenoptera (abejas, hormigas, etc.)
· Miomoptera - extinto
· Protodiptera extinto
Br. Alfredo Contreras
C.I: 15.695.767
Sección “B”