miércoles, 11 de julio de 2007

Control de Plagas


Cualquiera de toda una gama de intervenciones medioambientales cuyo objetivo sea una reducción en la incidencia de las plagas de insectos, los organismos patógenos para las plantas y las enfermedades que causan, y las poblaciones de malas hierbas de forma que se pueda permitir una producción máxima de alimentos de alta calidad y otros cultivos.


Las técnicas específicas de control incluyen mecanismos químicos, físicos y biológicos. Un 90% del mundo depende para su abastecimiento de alimentos de tan solo 15 grandes tipos de cultivos y siete especies de animales. A pesar de todos los esfuerzos realizados, las plagas destruyen anualmente cerca del 35% de las cosechas en todo el mundo. Incluso una vez recogidas las cosechas, los insectos, los microorganismos, los roedores y las aves infligen una pérdida adicional de entre un 10 y un 20%, con lo que las pérdidas oscilan entre un 40 y un 50%.


Apesar de que muchas zonas del mundo se enfrentan a una grave escasez de alimentos, el desarrollo industrial, las aglomeraciones humanas y la explotación de diversos recursos naturales (como la minería o las grandes presas) están reduciendo la superficie de terreno empleada para el cultivo. El control de las plagas permite una optimización del rendimiento de las tierras de uso agrícola.Control de plagas, cualquiera de toda una gama de intervenciones medioambientales cuyo objetivo sea una reducción en la incidencia de las plagas de insectos, los organismos patógenos para las plantas y las enfermedades que causan, y las poblaciones de malas hierbas de forma que se pueda permitir una producción máxima de alimentos de alta calidad y otros cultivos.


Las técnicas específicas de control incluyen mecanismos químicos, físicos y biológicos. Un 90% del mundo depende para su abastecimiento de alimentos de tan solo 15 grandes tipos de cultivos y siete especies de animales. A pesar de todos los esfuerzos realizados, las plagas destruyen anualmente cerca del 35% de las cosechas en todo el mundo. Incluso una vez recogidas las cosechas, los insectos, los microorganismos, los roedores y las aves infligen una pérdida adicional de entre un 10 y un 20%, con lo que las pérdidas oscilan entre un 40 y un 50%. A pesar de que muchas zonas del mundo se enfrentan a una grave escasez de alimentos, el desarrollo industrial, las aglomeraciones humanas y la explotación de diversos recursos naturales (como la minería o las grandes presas) están reduciendo la superficie de terreno empleada para el cultivo. El control de las plagas permite una optimización del rendimiento de las tierras de uso agrícola.

Fungicidas


Europa occidental es el mayor mercado del mundo de fungicidas, que son necesarios para controlar la gran variedad de hongos patógenos que atacan las cosechas de cereales de grano pequeño y los viñedos. El mildiu pulverulento (Erisyphe graminis) probablemente sea la enfermedad producida por hongos más importante del mundo, y constituye uno de los principales objetivos de los nuevos fungicidas debido a su capacidad de atacar a muchas plantas distintas, desde el trigo y la cebada hasta las enredaderas, causando pérdidas de cerca de 300 millones de dólares sólo en la producción de cereales. En Japón y en el Sureste asiático, donde el arroz constituye la base de la alimentación, se necesitan fungicidas específicos para controlar la plaga de Pyricularia oryzae, que produce pérdidas de producción por valor de 180 millones de dólares, o la roya del arroz (Pellicularia sasakii), cuyas pérdidas se cifran en 160 millones de dólares. Muchos de los fungicidas eficaces de nuestros días pertenecen al grupo de los triazoles o al de las morfolinas. Los nuevos compuestos de triazol, como el epoxiconazol, el tebuconazol y el fluquinconazol siguen aún en fase de desarrollo para su empleo a nivel mundial. Para superar la capacidad de los hongos patógenos de adaptarse a los pesticidas y generar resistencia frente a ellos, hoy es práctica común combinar fungicidas que actúan de diferentes formas. Las estrobilurinas son unos fungicidas de nueva generación que se basan en hongos silvestres pertenecientes al género Strobilurus, cuya acción es tóxica para otros hongos patógenos.

Herbicidas


El uso de herbicidas varía de acuerdo a los sistemas de cultivo y a la cosecha en cuestión; ellos solos representan casi la mitad del valor de todos los pesticidas utilizados. En países con sistemas de cultivo menos intensivos, quizá solo sea económicamente viable el uso de compuestos más antiguos, como el 2,4-D (ácido 2,4-diclorofenoxiacético) para matar las malas hierbas de hoja ancha. Estos herbicidas más antiguos se miden en kilogramos por hectárea en lugar de gramos por hectárea, que es lo que se requiere cuando se emplean las sulfonilureas. A pesar de su elevada actividad en la eliminación de una gran variedad de especies de malas hierbas, estos nuevos herbicidas tienen un periodo de persistencia en el suelo muy breve, y se descomponen en elementos inocuos. Los herbicidas pueden aplicarse directamente en el suelo, pero la mayoría de los nuevos productos se fumigan sobre las malas hierbas en desarrollo, con lo que interfieren con sus sistemas de crecimiento sin dañar los cultivos. Los herbicidas totales, como el paraquat, el glufosinato amónico y el glifosato, solo pueden emplearse antes de que los cultivos surjan de la tierra. No obstante, se han desarrollado nuevas variedades de patatas (papas), trigo, remolacha azucarera y tabaco que contienen genes que les confieren resistencia a los herbicidas. Algunos de los herbicidas que se aplican en los campos de cereales para el control de plagas de herbáceas requieren la adición de un producto químico que aumenta las defensas naturales del cereal frente a compuestos como el fenoxaprop-p-etil mientras este elimina las malas hierbas.

Insecticidas


Los insecticidas suponen el sector más pequeño del mercado mundial de los pesticidas, y representaron una inversión de unos 4,5 millones de dólares en 1993, lo que equivale a un 28% del total del mercado de los pesticidas. A menudo son los más controvertidos debido a los indeseables efectos medioambientales sobre la fauna silvestre que tuvieron los antiguos organoclorados, que han sido prohibidos, o son estrictamente controlados en la mayoría de los países. Dado que los insecticidas son los pesticidas que menos dinero dan y en vista de la alarma pública ante los daños que sufren especies útiles, como las abejas, los fabricantes invierten poco en su desarrollo desde la introducción, con gran éxito, de las piretrinas. No obstante, los insectos son considerados el objetivo ideal de la nueva generación de biopesticidas.

Biotecnología


La biotecnología está contribuyendo al control de las plagas de diversas maneras. Potencialmente, la más controvertida es la creación de virus artificiales que tengan como objetivo exclusivo ciertas larvas o plagas de insectos al ser fumigados sobre los cultivos. Los virus, que son inofensivos para otras especies, se autodestruyen cuando su trabajo tóxico ha terminado. Otros enfoques incluyen la síntesis de productos aleloquímicos y feromonas naturales que generan los insectos para advertir del peligro a sus congéneres y alejarlos así de las cosechas. Estas hormonas animales o feromonas se utilizan para el control de plagas de cultivos forestales como el de la procesionaria del pino. Hay unos productos que se pueden esparcir alrededor de los campos para impedir que las plagas de insectos se alimenten y, por tanto, que causen daños. También pueden fumigarse sobre los campos unos gusanos diminutos llamados nematodos para combatir plagas como las babosas. Más tarde explotan en el interior del sistema digestivo de éstas. Estos son solo los primeros ejemplos, que se han experimentado con éxito, de muchos cientos de especies de virus, protozoos, hongos y nematodos que parasitan insectos y malas hierbas y en la actualidad están siendo investigadas como agentes de control selectivo.

Control no Quimico


Arrancar a mano o con azada o azadón las malas hierbas es un trabajo que ha sido mecanizado hace ya mucho tiempo y en la actualidad los agricultores emplean otros controles no químicos. Arar para enterrar en la tierra las malas hierbas, las semillas o los hongos patógenos puede resultar tan eficaz como el control químico. Se está multiplicando la resistencia natural de los cultivos, tanto a las enfermedades como a las plagas de insectos, por medio de la ingeniería genética, introduciendo en las plantas genes de resistencia específicos. La gestión integrada de plagas es un sistema en el que se unifican medios de control por métodos de cultivo, por rotación de cosechas, por el empleo de variedades fortalecidas y por el uso estratégico de cantidades menores de pesticidas para conseguir resultados iguales o mejores a los obtenidos por medio de un control exclusivamente químico. También se fomenta la persistencia de setos de separación entre cultivos y de áreas de vegetación natural, de forma que allí puedan desarrollarse poblaciones de insectos beneficiosos para los cultivos, como la mariquita (Coccinella septempunctata) que es una especie predadora de otros insectos perjudiciales para cultivos como el de los cereales de secano.

martes, 10 de julio de 2007









Formulación De Hongos Entomopatógenos Como Control Biológico


Las plagas agrícolas han sido controladas durante años mediante el empleo de plaguicidas químicos de fuerte impacto negativo sobre los organismos benéficos presentes en el ambiente.


Con el objetivo de promover y acelerar el uso de hongos en el control de plagas en los cultivos es necesario el desarrollo de formulaciones eficaces y estables que permitan su manejo y aplicación en el campo. En este artículo se presentan consideraciones que se deben tener en cuenta para el desarrollo de productos de origen fungoso, los tipos de formulaciones en que pueden ser presentados y los logros obtenidos en este tema considerando que la forma granulado y polvo humedecible son las más usada hasta estos momentos en la presentación de este tipo de producto.


El desarrollo y aplicación de agentes de control biológico de plagas adquiere una importancia relevante como una alternativa en el desarrollo de una agricultura sostenible que preserve los recursos naturales y el medio ambiente para las futuras generaciones. La aplicación controlada en agro ecosistemas de organismos vivos o sus metabolitos para el control de plagas y enfermedades, implica el mejoramiento de los cultivos, al proteger las plantas del deterioro producido por agentes fitopatógenos.



En la naturaleza, los hongos entomopatógenos pueden eliminar o mantener las plagas en niveles que no ocasionan daños económicos a los cultivos (Acevedo J.L. y Melo I.S. 1998) Estos hongos se encuentran en rastrojos de cultivos, estiércol, en el suelo, las plantas; logrando un buen desarrollo en lugares frescos, húmedos y con poco sol. Constituyen, además, el grupo de mayor importancia en el control biológico de insectos plagas. Prácticamente, todos los insectos son susceptibles a algunas de las enfermedades causadas por hongos.

Consideraciones generales

Una buena formulación es la base para el éxito de un bioplaguicida de origen microbiano; la posibilidad de obtener productos adecuados depende de las propias características del microorganismo y su relación con los componentes de la formulación (excipientes) y el ambiente de almacenamiento.Para el desarrollo de nuevos productos de origen biológico se deben tener en cuenta diferentes aspectos: primeramente definir un medio de cultivo óptimo y el mejor sistema para la obtención masiva de inóculo que permita una buena relación costo - rendimiento en la producción; establecer ensayos de producción a pequeña escala; garantizar la estabilidad del producto y determinar las condiciones de almacenamiento; poder utilizar la maquinaria standard de cualquier explotación agrícola para su aplicación, y ser efectivo a unas dosis parecidas a las utilizadas para los agroquímicos así como bioensayos de laboratorio, invernadero y campo que confirmen la efectividad del producto una vez formulado .



El objetivo de una formulación de hongos entomopatógenos es aumentar la estabilidad durante el almacenamiento y después de la aplicación Las propiedades físicas y biológicas de la formulación deben permanecer estables por un tiempo mínimo de 12 meses, pero es recomendable que se mantengan durante 18 meses para permitir su comercialización. Además de mejorar la adhesión a la cutícula del insecto; aumentar o mantener la virulencia y permitir su aplicación con equipos de volumen ultra bajo.

Tipos de Formulaciones

Ventajas
Desventaja
Descripción
Polvo (P=Powder o Dusts)

No necesita dilución, ni mezclado antes de usarRiesgo de inhalación o adhesión a la piel, Sustancia activa más un portador inerte. Apropiada para aplicaciones directamente al suelo. Granulados (G=Granules)
Dosificación más fácil, reducción de la cantidad de producto adherido a los envases, equipo de aplicación simple y menos riesgo para los aplicadores.Liberación lenta del principio activo y puede necesitar humedad para empezar a actuar.Sustancia activa con un soporte mineral y un agente humectante que le de cohesión.


Útil para aplicaciones directamente al suelo.
Polvos humedecible (WP = Wettable Powder.

Fácil almacenamiento, transporte y manejo, menos peligro de absorción por la piel y los ojos en el momento de aplicación. Requiera agitación buena y constante; Abrasivo a muchas bombas y boquillas provocando desgaste de los equipos de aplicación. Riesgo potencial por inhalación. Sustancia activa con un soporte mineral y sustancias que contribuyan a su suspendibilidad, dispensabilidad y estabilidad, Puede ser utilizada para aspersiones foliares.
Polvos floables secos o gránulos dispersables (WG= Wettable Granules): Fácil manejo y aplicación y raramente obstruye las boquillas. Agitación constante y puede dejar residuos. Granulado del ingrediente activo junto a otros componentes similares al polvo mojable. Puede ser utilizada para aspersiones foliares.

Materiales microencapsulados:

Productos más seguros para operarios de campo; la liberación gradual de la parte activa aumenta la eficacia; el producto sufre menor volatilización y menos olores.
Agitación constante necesaria en tanque.

Tecnología cara

Partícula sólida o líquida del ingrediente activo cubierta por un material sintético Apropiada si se necesita proteger al principio activo del medio circundante y controlar el tiempo de liberación del mismo.

Concentraciones emulsionables (EC = Emulsifiable Concentrate.)

Emulsiones que tienen una actividad biológica mucho más elevada que una suspensión de partículas sólidas de la misma sustancia activa y pueden manipularse con facilidad.

Por la presencia de los disolventes orgánicos que son caros e inflamables, requieren instalaciones especiales de fabricación y almacenamiento y suelen presentar cierta toxicidad por inhalación o por contacto con la piel.

Sustancia activa más un disolvente orgánico.
Se obtiene una acción rápida del principio activo.
Floables o Suspensiones Concentradas (SC=Suspention Concentrate)

Las suspensiones concentradas son de fácil manipulación y aplicación por ser formulaciones líquidas.
Tienen las mismas dificultades que los EC cuando hay derrames o salpicaduras.Tienen poder abrasivo sobre boquillas y bombas.
Ingrediente activo con emulsificantes y dispersantes. Se obtiene una acción rápida del principio activo.

Control de calidad de las formulaciones:
La comercialización de controles biológicos basados en hongos entomopatógenos requieren de un control adecuado de las propiedades biológicas, físicas y químicas realizadas por el departamento de Control de la Calidad de la firma productora que aseguren al usuario un producto de máxima eficacia en condiciones de campo.Algunas pruebas microbiológicas recomendadas son:Concentración de esporas: Establece la dosificación del producto.Germinación de esporas: Determina la viabilidad del hongo en la formulación.Pureza: Revela la proporción del agente biológico en la formulación e identifica los microorganismos contaminantes con el objetivo de mejorar el proceso de producción y formulación de los entomopatógenos


Articulao Elaborado: Ender Rubio CI: 16886090

Producción de Bioinsecticida a Base de Bacillus Thuringiensis



La bacteria Bacillus thuringiensis (Bth)





Es un bacilo gram-positivo, flagelado y esporulado que se caracteriza por la formación de un cuerpo paraesporal o cristal de proteína, conocido como delta-endotoxina, estos cristales se forman durante la esporulación y tienen actividad tóxica para larvas de insectos.

Cuando el cristal es ingerido por un insecto susceptible en fase larvaria llega a su intestino medio, se disuelve por la acción de los jugos intestinales a pH alcalino, aquí la delta-endotoxina sufre una proteolisis enzimática y da origen a la toxina activa, la cual se une a un receptor específico de las membranas epiteliales de las células del intestino, lo que genera poros que desequilibran su balance osmótico y provocan la lisis celular de esta partedel aparato digestivo, posteriormente causa diarrea y vómitos en el insecto, lo que puedeprovocar eventualmente su muerte por una deshidratación severa.

La selección de un aislado silvestre de Bth y su capacidad efectiva para producir cristales tóxicos y posible manipulación genética para mejorarla, al igual que sus requerimientos nutricionales, son aspectos fundamentales en la producción del bioinsecticida a base de esta bacteria; una etapa clave en el proceso de escalonamiento masivo para la producción de la delta-endotoxina, y su posterior formulación y aplicación a nivel de campo.



En términos del tipo de constituyentes, la fuente de carbono (C) orgánica más empleadas son: la glucosa, el almidón y secarosa, reconocidas como esenciales para la síntesis de cristales, aunque Couch y Ross en 1980, al utilizar como fuente de C materias primas baratas, como productos de maíz hidrolizado (almidón y dextrinas), al igual que Murga en 1983 jugo de agave y melaza de caña (fructosa), excelentes resultados sobre la esporulación y calidad tóxica del cristal.

Cabe mencionar que a melaza de caña se considera una materia prima adecuada como fuente de C, de bajo costo con efectos positivos sobre la toxicidad de la delta-endotoxina. Es claro que la ausencia de una fuente adecuada de C para Bth, causa una disminución en la producción de esporas y en la formación y calidad de la deltaendotoxina.


En el caso de fuentes de Nitrógeno (N) : Se ha reportado que Bth requiere de aminoácidos esenciales y otras formas orgánicas de nitrógeno durante su fase de crecimiento y durante la esporulación en general en los medios de cultivo comerciales se han empleado proteínas de semilla y/o agua de cocimiento de maíz, otras alternativas más baratas han sido obtenidas de fuentes naturales como la harina de pescado, de la semilla de algodón, o de leguminosas como la soya, el garbanzo, la haba, el cacahuate y las lentejas, o bien de líquido de remojo de maíz; de residuos de levadura, de sangre de res, del suero de queso y productos secundarios de la industria láctea, esta clase de materia prima estimula la biosíntesis de la delta-endotoxina con alta actividad insecticida.


Elaborado Por Alfredo Aguilar CI.17.129.219

Control Biologico de Plagas












Biodiversidad Funcional y Gestión del Agroecosistema


La percepción popular de plaga ha ido asociada tradicionalmente a aquello indeseable y que se produce en grandes cantidades; probablemente las referencias bíblicas a las mismas han contribuido especialmente a popularizar esa percepción unida a la producción de alimentos. La terminología más estricta en el ámbito de la agronomía recoge en gran medida esa percepción popular.



Los consumidores secundarios con más relación con los fitófagos pertenecen a unos de los tres grupos fundamentales de los llamados enemigos naturales de las plagas: depredadores, parasitoides y entomopatógenos. De entre éstas, algunas fitófagas –una clara minoría- aumentan su densidad con cierta frecuencia hasta alcanzar valores indeseables porque repercuten en el rendimiento del cultivo si no se toman medidas de control; son las denominadas plagas.


Los enemigos naturales como factor de mortalidad de plagas: control natural Averiguar las causas de semejantes aumentos de población facilita su control porque algunas de ellas pueden ser corregidas; otras, por el contrario, son tan inherentes a la agricultura misma que se hace difícil o no rentable su corrección. Buena parte de las prácticas agrícolas y manipulaciones de los hábitats no agrícolas que son favorecedoras de plagas lo son por interferir o mermar la actividad de los enemigos naturales.


Hay que tener en cuenta que la mayor parte de las decenas de insectos y ácaros herbívoros que se pueden encontrar habitualmente en nuestros cultivos no suelen alcanzar densidades perjudiciales gracias a la acción de sus enemigos naturales; es el llamado control natural.

Es en este fenómeno donde reside el enorme potencial del control biológico.


Control biológico: necesidad, pero... Entre estos últimos, el control biológico ha ocupado un lugar preferente. Después de más de un siglo de éxitos notorios –y también de fracasos- el control biológico ha sido criticado desde ámbitos científicos por los riesgos que la introducción de especies exóticas de enemigos naturales supone para otras especies de artrópodos fitófagos que no son el objetivo de la actividad de control y también para otras especies de enemigos naturales autóctonos que pueden verse desplazados o incluso directamente atacados. d. Control biológico: estrategias No todas las estrategias seguidas actualmente por el control biológico entrañan la misma cantidad de riesgo, sino que son mayores en las llamadas estrategias de control clásico e inundativo que en el de conservación.


El control biológico clásico utiliza especies exóticas de enemigos naturales para el control de plagas también exóticas.


Control biológico de conservación a. En qué consiste y qué objetivos tiene Buena parte de los programas de control biológico de plagas se basan en la presencia espontánea de los enemigos naturales dentro del cultivo y es bien conocido que, para que sean efectivos, es muy importante asegurar una buena relación entre la presa y sus entomófagos. A eso dirige sus intervenciones el control biológico por conservación.


El cultivo: naturaleza, manejo y ciclo. Identificar y corregir esas prácticas perjudiciales para los entomófagos puede ser un procedimiento del control biológico por conservación relativamente sencillo. En determinados cultivos intensivos el ciclo de cultivo puede manipularse en gran medida; es el caso por ejemplo del cultivo protegido bajo plástico o cristal. Esta necesidad y beneficio del alimento vegetal está bien documentada para muchos parasitoides. En conjunto, esto les confiere una ventaja frente a otros entomófagos al poder subsistir e instalarse en el cultivo cuando aún hay poca plaga. La flora adventicia de los cultivos requiere una consideración especial. Los resultados de las distintas prospecciones en los cultivos indican claramente que muchos enemigos naturales de sus plagas se encuentran en plantas tradicionalmente consideradas 'malas hierbas'. Por lo tanto, el control biológico también debe incluir aquellas modificaciones del hábitat destinadas a crear las condiciones que favorecen la supervivencia, fecundidad, longevidad y acción de los enemigos naturales y mejoran su colonización del cultivo.


Biodiversidad, control biológico y la consideración del paisaje. Los cultivos anuales, y gran parte de la horticultura mediterránea intensiva en particular, representan un reto especial para el control biológico. Como consecuencia, los entomófagos deben recolonizar el campo de nuevo en cada cultivo con lo que materialmente no hay tiempo para que se establezca una relación duradera con la plaga. Pero por las mismas características de estos mosaicos con rotaciones de cultivos, la viabilidad económica de estas revegetaciones requiere que sean 'multifuncionales' y aseguren el control biológico de plagas en los diversos cultivos a lo largo del año. Las prospecciones realizadas en cultivos en los que se aplican más insecticidas, priman los entomófagos más ubícuos adaptadas a estas perturbaciones.
Elaborado por :Ender Rubio CI: 16.886.090

viernes, 15 de junio de 2007

UNIDAD DE BIOLOGÍA
Y CONTROL BIOLÓGICO DE PLAGAS

El control biológico se presenta como una alternativa eficaz, esperanzadora y libre de riesgo frente a los numerosos y crecientes problemas derivados del uso de los productos químicos biocidas. El control biológico por definición, consiste en la aplicación de técnicas compatibles con la conservación del Medio Ambiente mediante el uso de los enemigos naturales de las plagas que actuando de un modo natural, controlan el nivel poblacional de las especies plaga sin ocasionar problemas de contaminación ni de residuos.
Debido a la compleja biología de los agentes controladores (en su mayor parte insectos), su éxito no está asegurado si no va precedido de estudios detallados sobre la biología de las especies implicadas y si su aplicación no es rigurosa.
Por todo ello el objetivo básico de esta Unidad de Investigación consiste en el desarrollo de investigaciones dirigidas a facilitar la diagnosis de los agentes plaga de cultivos agrícolas, forestales, ornamentales, medios urbanos e insectos vectores de enfermedades en el hombre y animales, proponiendo soluciones para su control mediante métodos biológicos
.



Hoja de naranjo con el pulgón plaga Aphis gossypii.




























Calliphoridae, Chrysomyia sp. Díptero plaga de áreas urbanas.

























Orugas de la procesionaria del pino, Thaumatopoea pytiocampa.



































Díptero, Calliphoridae, Lucilia sericata alimentándose de néctar de las flores de Daucus.

























Parasitoide introduciendo un huevo en una pupa de sírfido (Diptera, Syrphidae).




































Larva afidófaga de Dasysyrphus albostriatus (Diptera, Syrphidae).



















































Foto Celeste Pérez
Syrphidae, Chrysotoxum sp. Díptero con larvas depredadoras de pulgones.
FEREIRA IVAN
C:I: 17.579.926

jueves, 14 de junio de 2007

Controladores Biologicos


http://www.youtube.com/watch?v=1GpaLbaW8is

Elaborado Por:

Alfredo Aguilar Ch.

C.I

17.129.219

Ventajas, desventajas, riesgos y beneficios del control biológico.

El control biológico cuando funciona posee muchas ventajas Poco o ningún efecto nocivo colateral de los enemigos naturales hacia otros organismos incluido el hombre.

La resistencia de las plagas al control biológico es muy rara.
El control biológico con frecuencia es a largo término pero permanente.
El tratamiento con insecticidas es eliminado de forma sustancial.
La relación coste/beneficio es muy favorable.
Evita plagas secundarias.

No existen problemas con intoxicaciones.
Entre las limitaciones que tiene el control biológico se pueden citar:
Ignorancia sobre los
principios del método.

Falta de apoyo económico.

Falta de personal especializado.

No está disponible en la gran mayoría de los casos.

Problemas con umbrales económicos bajos

Enemigos naturales mas susceptibles a los plaguicidas que las plagas.

Los enemigos naturales se incrementan con retraso en comparación a las plagas que atacan, por lo cual no proveen una supresión inmediata.


Un éxito completo se obtiene cuando se utiliza el control biológico contra una plaga importante y sobre un área extensa a tal grado que las aplicaciones de insecticidas se vuelven raras.

El éxito sustancial incluye casos donde las ganancias son menos considerables ya que la plaga y el cultivo son menos importantes o cuando el área cultivada es pequeña o porque ocasionalmente se requiere el uso de insecticidas.


El riesgo. La introducción de agentes de control biológico frecuentemente se declara por ser ambientalmente segura y sin riesgos, sin embargo, existen evidencias que indican que esta aseveración no es del todo cierta.


La mayoría de los fracasos de control biológico se han debido a errores por la carencia de planificación y pobre evaluación de los enemigos naturales antes de una introducción.

En algunos casos los errores han sido tan funestos que se ha provocado la extinción de otras especies.


Actualmente se reconoce que algún riesgo es inherente en los programas de control biológico como en cualquier otra estrategia de control.


Articulo Elaborado por:

Alfredo Aguilar Chacón

C.I 17.129.219

PLANTAS HOSPEDERAS DE ENEMIGOS NATURALES DE PLAGAS EN PALMA ACEITERA

El dominio de las poblaciones de plagas es uno de los factores determinantes del rendimiento de la palma aceitera. Actualmente se utiliza con éxito una variedad de técnicas de lucha:

* Control químico, mediante absorción radical para proteger los enemigos naturales.

* Aplicaciones de hongos, bacterias y virus entomopatógenos.

* Trampeo y captura con sustancias atrayentes de un insecto específico.

Todas estas prácticas se pueden complementar con el manejo particular de la flora existente en las plantaciones, para favorecer el desarrollo de enemigos naturales de las plagas.

En el complejo de malezas existentes en las plantaciones se encuentran algunas plantas en particular, que son atractivas y sirven de soporte alimenticio para una población importante de los insectos-parásitos y predatores de las plagas de importancia económica en el cultivo de la palma aceitera.

Por otra parte, los grandes cambios ocasionados sobre el complejo de malezas mediante su control, pueden causar desequilibrios en el sistema ecológico, promoviendo variación en las poblaciones de insectos (plagas o benéficos).


Los insectos-parásitos y predatores son, por lo general, capaces de ejercer un buen control natural y es importante prestar mayor atención a este aspecto, protegiendo y favoreciendo la presencia de aquellas plantas que le sirven de alimento o refugio.

Melanthera aspera (Asteraceae), engorda machos; Heliotropium indicum (Boraginaceae), rabo de alacrán; Emilia sonchifolia (Asteraceae), botón rosado y Croton sp. (Euphorbiaceae), amargosito
Se realizó un muestreo preliminar para seleccionar las plantas más visitadas por los insectos-parásitos.

Estas plantas fueron sometidas posteriormente a muestreos semanales para determinar la cantidad de insectos presentes por cada especie.

Simultáneamente se recolectaron los de-foliadores parasitados que se encontraban atacando a la palma para ese momento, los cuales fueron llevados al laboratorio donde se colocaron en condiciones adecuadas para que emergieran los adultos de los parásitos y así relacionarlos con los insectos recolectados en las malezas.
Se encontró que más de 60% de los insectos capturados sobre estas plantas eran parásitos de los defoliadores que atacaban al cultivo durante la época de muestreo. La mayor proporción (30 - 40%) de insectos-parásitos por genéros capturados en cada especie vegetal pertenecían al género Trichogramma (Trichogrammatidae: Hymenóptera).

La cantidad de insectos capturados sobre las especies M. aspera y Croton sp. duplicó a las capturas realizadas sobre H. indicum y E. sonchifolia .

Los himenópteros parásitos pertenecientes a los géneros Cotesia (Braconidae) y Trichogramma (Trichogrammatidae) fueron capturados en las cuatro especies de las plantas atractivas reconocidas.


El género Conura (Chalcididae) se capturó sobre M. aspera y Croton sp.
Insectos-parásitos de la especie perteneciente al género Cotesia que parasitan a Sibine fusca


(Limacodidae: Lepidóptera) se capturaron sobre E. sonchifolia .
Estas cuatro especies vegetales merecen alguna medida de protección, ya que cada una de elllas contribuye a favorecerer el desarrollo de enemigos naturales de las plagas de palma en las plantaciones; por lo tanto, al momento de efectuar el control de malezas es indispensable evitar su eliminación.

Una observación de gran importancia en este estudio es el hecho que estas plantas eran atractivas para los insectos en aquellas áreas en las que se encontraban totalmente expuestas a la luz solar, mientras que bajo la sombra de la palma la atracción era muy escasa.
Los resultados de este trabajo nos indican que para realizar un buen manejo integrado de las plagas en el cultivo de la palma aceitera, es necesario darle mucha importancia al control de las malezas, tomando en cuenta las recomendaciones siguientes:

* Permitir el desarrollo de algunas plantas silvestres que resultan atractivas y favorecen la presencia de insectos benéficos en las plantaciones de palma aceitera, como las que se mencionan en la lista anexa (Cuadro 1).

* Existen plantas muy agresivas que compiten muy bien con la palma por nutrimentos, agua y luz, debido a su gran producción de hojas y a su alto poder de propagación y que deben ser manejadas con mucha precaución. Si es necesario favorecer su desarrollo, debe hacerse preferiblemente en áreas estratégicas donde se puedan controlar. Tal es el caso de Melanthera aspera (engorda machos) y Solanum hirtum (huevo de gato).

* Las plantas de porte bajo y poco crecimiento se pueden proteger y propagar en áreas como las orillas de las parcelas cultivadas, ya que no representarían ningún obstáculo.

* Los espacios libres que quedan cuando se erradican las palmas resultan bastante apropiados para favorecer a estas plantas atractivas de insectos-benéficos.

* En las áreas sombreadas por la palma no es recomendable favorecer el desarrollo de estas plantas benéficas, debido a que su efecto de atracción a los insectos es muy bajo.


Articulo Elaborado Por:

Alfredo Aguilar Chacon

C.I 17.129.219

Control biologico

COLOMBIA, LÍDER EN CONTROL BIOLÓGICO DE PLAGAS
A consecuencia del incremento y conservación de agentes de control biológico como el Trichogramma Pretiosum Riley, se registran últimamente descensos poblacionales de plagas que anteriormente demandaban control químico.

En Colombia, específicamente en el departamento del Valle del Cauca, se vienen implementando programas de Manejo Integrado de Plagas (MIP) en varios cultivos como algodonero, tomate, soya, fríjol, yuca, plátano, sorgo, maíz y frutales, con el fin de evitar el uso de insecticidas y permitir la restauración de los ecosistemas alterados en su equilibrio biológico "En estos programas es necesario recuperar, conservar e incrementar las especies benéficas eliminadas por los químicos, entre ellas, parasitoides, depredadores, y entomopatógenos, ya que son parte fundamental de programas de control biológico de plagas", manifiesta Fulvia García Roa, Ingeniera Agrónoma y entomóloga de Corpoica.

Durante los últimos veinte años, el Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, ha concentrado la investigación entomológica en la búsqueda de alternativas tendientes a enriquecer y diversificar los programas de manejo integrado de plagas.
Las investigaciones se han dirigido preferencialmente a probar la efectividad del parasitoide Trichogramma, a nivel de campo, para estudiar su comportamiento y obtener los más altos niveles de parasitismo que determinen un manejo adecuado del insumo biológico. De igual manera, la institución ha sido vigilante del proceso de producción del parasitoide a escala comercial para asegurar una alta calidad del material vendido al agricultor.
Los parasitismos alcanzados por Trichogramma superan entre el 80 y 90% de la oviposiciones, protegiéndose el cultivo de daño por larvas, las cuales difícilmente pueden ser detectadas sobre las plantas.

El haber sostenido durante mucho tiempo la práctica de liberar Trichogramma y simultáneamente dejado de aplicar insecticidas en más de 200.000 hectáreas del Valle del Cauca, ha propiciado también el resurgimiento y la multiplicación de variadas especies de parasitoides, depredadores y entomopatógenas que prácticamente habían desaparecido y que complementan la magnífica acción de Trichogramma en el campo.
Como consecuencia del incremento y conservación de agentes de control biológico se registran últimamente descensos poblacionales de plagas que anteriormente demandaban control químico.
Gracias a programas de este estilo, Colombia mantiene un liderazgo en control biológico, a nivel latinoamericano, dada la experiencia y la tecnología generada en la producción y manejo del parasitoide Trichogramma, situación que ha reclamado una actividad de asesoría, capacitación y transferencia.

La reducción económica en gastos relacionados con la inversión en control químico y la aplicación de insecticidas se estima de 50 a 70% de los costos de control, presentándose situaciones en las cuales se pasó de más de 20 aspersiones por cosecha de algodón a un manejo biológico de 200 pulgadas de Trichogramma por hectárea.

lunes, 11 de junio de 2007

CONTROL DE PLAGA CON TRANPAS PREPARADAS

COCHINILLAS


Solución de tabaco: Macerar 60 grs. de tabaco en 1 litro de agua, agregándole 10 grs. de jabón blanco. Se pulveriza, diluyéndolo en 4 lts. De agua. Solución de jabón Blanco: Disolver jabón blanco en agua y pulverizar.





CHINCHES


Cenizas de madera alrededor de los tallos para impedir que suban las chinches. Cal apagada Infusión o Decocción de Manzanilla








GORGOJOS


Macerado de ajo alcohol , Infusión de Ajenjo , Trampa Cisterna



HORMIGAS


Trampa de adherencia para hormigueros a base de resina o vaselina por ejemplo. Rociar las entradas de los hormigueros con agua jabonosa y detergente biodegradable. Trampa repelente de grasa para hormigas: Solución de queroseno y jabón:50 CC. De queroseno, 25 grs. de jabón blanco y 1 litro de agua. Hervir el jabón en agua hasta diluirlo. Mientras hierve, agregar el queroseno. Mezclar enérgicamente hasta lograr una emulsión cremosa. Vaporice ligeramente las plantas afectadas, e impregne los alrededores. Se puede usar también contra pulgón y gusanos. Infusión de ajo tibia Fabrique un embudo con papel plata (de los del chocolate) ajustándolo al tronco de la planta a tratar y con la apertura ancha hacia arriba. Esto desconcierta a las hormigas que no pasarán. No obstante puede introducir en el interior algún hormiguicida o algodón impregnado en materia pegajosa como resina o vaselina. Macerado de frutos de paraíso: Poner a macerar en agua frutos de paraíso durante 24 hs., se sacan los frutos y se pulveriza con esa solución sobre las plantas. Purín de Ajenjo: Se usan las partes verdes y las flores, a razón de 300 grs., por litro de agua como planta fresca. Se aplica sobre las partes afectadas de las plantas y sin diluir.






MOSCA BLANCAS


Macerado de Ajo Alcoholizado , Solución de jabón Blanco con aceite mineral



ORUGAS


Agua jabonosa con tabaco , Cenizas de madera , Cal apagada , Preparado de ajo alcoholizado: Triturar 1 cabeza de ajo, agregar ½ litro de alcohol y ½ litro de agua. Utilizarlo sin disolver. Infusión de Ajenjo


BABOSA-CARACOLES-BICHOS BOLITAS
Trampa de cerveza en el suelo. Trampa de hojas carnosas. Trampa de adherencia. Cal Apagada: En dosis muy bajas. Sal.

CONTROL DE PLAGAS CON TRAMPAS Y PREPARADOS

ARAÑUELA
urín en fermentación de ortiga. Infusión extracto de ajo. Alcohol de ajo: 4 ó 5 dientes de ajo, medio litro de alcohol fino y medio litro de agua. Se coloca en licuadora 3 minutos y luego se cuela. Se guarda en frasco tapado en frigorífico. Se utiliza ante el ataque de ácaros, pulgones y gusanos. Infusión de ajenjo. Caldo Bordelés: Sulfato de Cobre, azufre para mojar o para espolvoreo

viernes, 8 de junio de 2007

RESUMEN SOBRE LA CLASE DE CONTROLES DE PLAGAS

1. Control.
El control de plagas con productos químicos es cada vez más complicado. La exigencia por los consumidores en la reducción de la aplicación de estos productos es cada vez más notable. Los productos agroquímicos no siempre dan buenos resultados, por lo que, se presta hoy día, mucha importancia a una agricultura más biológica.
También se puede decir que todo tipo de control puede ser regulando o disminuyendo los niveles de plagas al caso que ya no causen daño en la producción.

2. INCONVENIENTES DE LOS PRODUCTOS QUÍMICOS.
Dentro de los productos químicos existen varios tipos todos ellos muy utilizados en agricultura, tanto para combatir plagas, enfermedades, malas hierbas, etc. Estos productos son:Insecticidas: Combaten a los insectosAcaricidas: Contra los ácaros, araña roja....Avicidas: Repelentes de aves.Funguicidas: Control contra enfermedades ocasionadas por hongos.Herbicidas: Eliminan las malas hierbas.Reguladores de crecimiento.
3. CONTROL BIOLÓGICO.
El control biológico se define como una actividad en la que se manipulan una serie de enemigos naturales, también llamados depredadores, con el objetivo de reducir o incluso llegar a combatir por completo a parásitos que afecten a una plantación determinada.Hay que considerar algunos puntos en la utilización de enemigos naturales en la plantación:

1. Se debe identificar bien el parásito que afecta al cultivo.
2. Identificación del enemigo natural.
3. Estimación de la población del parásito.
4. Estimación de la población del enemigo natural.
5. Comprar correctamente a los enemigos naturales.
6. Supervisar correctamente la eficacia de estos enemigos.Para la identificación del parásito puede realizarse un pequeño muestreo de estas especies y mandarlo a un laboratorio entomológico, si no se tiene perfectamente identificado por métodos directos.Aprovechar la acción de enemigos naturales de las plagas. - No usar insecticidas. - Plantar hospederos para mantener los enemigos naturales. - Recolectar enemigos naturales y distribuirlos.
4. VENTAJAS E INCONVENIENTES DEL CONTROL BIOLÓGICO.
4.1. VENTAJAS DEL CONTROL BIOLÓGICO.
La incorporación del control biológico, es un medio de lucha integrada respetando el medio ambiente, debido a que no se emplean insecticidas, lo que da más seguridad, evitar estos productos tóxicos para la salud humana.El método de control biológico impide las poblaciones de parásitos en las plantaciones agrícolas y por consiguiente la pérdida de altos niveles de producciónEl uso de productos biológicos ya viene ajustada al tipo de parásito y llegan a matar una amplia gama de insectos y no producen daño a los insectos benignos.
4.2. INCONVENIENTES DEL CONTROL BIOLÓGICO.
El control biológico requiere mucha paciencia y entretenimiento y un mayor estudio biológico.Muchos enemigos naturales son susceptibles a pecticidas por lo que su manejo debe de ser cuidadoso.
5. ENEMIGOS NATURALES
Los organismos que se alimentan de insectos plaga se consideran beneficos, ya que ayudan a controlarlas.

PREDADORES: son los que cazan a los insectos de las plagas y se las comen, por lo tanto al alimentarse bajan la población de insectos dañinos. Coccinélidos como las Vaquitas.Predadoras de chinches: Hippodamia (naranja y negro)Eriophis conexa (roja y negra)Predatoras de pulgones: Cicloneda sanguínea (roja) Hippodamia convergens
PARASITOIDES: Insectos parásitos de otros insectos, necesitan del huésped para reproducirse. Colocan sus huevos dentro o fuera del huésped, parasitando al insecto plaga. Microhimenópteros: Son avispitas parásitas que en su estadio inmaduro (larvas) pueden comportarse como endo o ectoparásitos de muchas plagas. Microhimenóptero adulto coloca huevos dentro de los pulgones. Trichograma: Parasitoide de huevos de lepidópteros (mariposa en estado adulto, orugas en estado larval)
6. MANEJO DE LOS ENEMIGOS NATURALES
Los enemigos naturales son insectos, ácaros diminutos, por lo cual su manejo es muy delicado. Deben ser guardados en condiciones relativamente frescas, con una temperatura ambiente y luz solar directa. Durante el transporte de estos depredadores, se les suministra unas cantidades de alimentos para mantenerles.En cuanto a la cantidad de enemigos naturales que debe de liberarse, se hace en función de la cantidad de plantas infectadas.
7.- PLAGAS IMPORTANTES
Se estima que todas las especies cultivadas hospedan entre 200 y 500 plagas, comprendidas aves, ratas, insectos, virus, hongos y bacterias. Miles de éstas se consideran "plagas importantes" en muchos países, y los daños económicos que causan anualmente a la agricultura alcanzan en todo el mundo miles de millones de dólares. Dado el ingente aumento en la circulación mundial de personas y productos, las fronteras naturales y las nacionales, que alguna vez fueron barreras eficaces contra la propagación de plagas, sufren ahora intensas presiones.
8. CONTROL ECOLÓGICO DE PLAGAS
- Con el control ecológico de una plaga no se debe intentar eliminarla, sino bajar sus niveles poblacionales por debajo del daño económico.

- La plaga forma parte del equilibrio del sistema.
Al eliminarla aparecen nuevos nichos ecológicos, que son ocupados inmediatamente por otros insectos y desaparecen los enemigos naturales que se alimentaban de los primeros.
-Utilizar plaguicidas continuamente crea resistencia de los insectos hacia el producto.
9. CONTROL INTEGRADO
Es la manipulación de poblaciones de insectos, utilizando uno o más métodos de control.
10. CONTROL CULTURAL
Son las acciones que crean un medio desfavorable para el desarrollo de las plagas:

- Manejo de malezas, manteniendo algunos hospederos de insectos benéficos. - Rotación de cultivos.
- Movimiento de la tierra.
- Épocas de siembra favoreciendo el escape en el tiempo a ciertas plagas.
- Asociaciones para repelencia y confusión.
- Cercos Vivos como barrera.
- Conducción adecuada de las especies hortícola: riego y nutrición.
- Uso de variedades resistentes.
11. CONTROL QUÍMICO
Debe ser la última acción para el control, ya que el uso de un insecticida produce ruptura en el sistema. Para usarlos, se debe tener en cuenta: - Presencia de enemigos naturales.

Elección del preparado de acuerdo a cada situación y no a una receta rígida.

jueves, 7 de junio de 2007

METODOS DE CONTROL DE LOS INSECTOS

RESEÑA HISTORICA

, Los métodos de lucha aplicados contra los insectos dañinos no se han perfeccionado hasta una época reciente, casi contemporánea. Para luchar contra las polillas del racimo, y otras plagas en general, todavía se empleabanace poco más de un siglo, recetas que participaban a la vez de la magia, la hechicería y la imprecación divina, brillantemente descritas por BALACHOWSKY (1951) fórmulas secretas, conservadas celosamente de familia en familia y legadas como un talismán, a los próximos y a los descendientes, formaban la base de una farmacopea oscura, donde se encontraban casi siempre mezclados el azufre, el mercurio (azogue), el vinagre, el betún, la cal, la pez, aceites y grasas diversas, la nogalina, el tabaco y las hierbas más variadas. Estos ungüentos, pomadas, infusiones decocciones, elixires se repartían sobre las plantas enfermas o sobre los insectos a destruir, y numerosos charlatanes no faltaban en exhibir su talento entre nuestros crédulos lugareños . En 1813, Decoueric aconseja la utilización de fuegos crepusculares contra la Piral de la vid escucharán un revoloteo en el aire y el ruidito que provocan las mariposas al quemarse, junto al que sus cuerpos expirantes o sin vida producen en su caída . En 1818, M. Deschamps, habiendo observado que las cepas situadas en las inmediaciones de las grandes rutas eran raramente atacadas por las orugas, aconseja repartir por las viñas en la buena temporada el polvo de los caminos (...). En 1860 para luchar contra la Cochylis (Clysia ambiguella Hb.), Marchisio de Turín impregna las yemas de viña, bien con una decocción de hojas de saúco adicionada a una mezcla de hollín y de áloe (Nombre vulgar de las plantas del género Aloe (Liliaceae) o de la sustancia resinosa amarga obtenida de las mismas, también llamada acíbar, de uso en medicina), bien con una decocción de hojas de tabaco mezclada con miel

Hasta el inicio del siglo XIX, en el espíritu de nuestros paisanos, las invasiones de insectos, sobre todo cuando se manifestaban con una brutalidad insólita (como es generalmente la regla), tenían una causa sobrenatural y se debían, bien a un sortilegio echado por hechiceras, envidiosos, incrédulos, bien a una punición infringida por la cólera celestial (...). A lo largo de la Edad Media, y en los siglos que seguirán al Renacimiento, se encuentra en los archivos episcopales de los diferentes países de Europa Occidental (Francia, Alemania, Suiza, Países Bajos, Inglaterra, Dinamarca, Suecia, Irlanda, España, Italia) la traza de numerosos "procesos" dirigidos por la Iglesia contra los insectos dañinos considerados como los enviados de Satán sobre la tierra, y cuyos perjuicios no podían ser evitados sino por las plegarias públicas, las penitencias, las procesiones, las abluciones, el agua bendita, y en fin, por un procedimiento de excomunión cuando las cosas tomaban un real carácter de gravedad (...). En 1562 los viñateros de Argenteuil, hacen, por orden del obispo de París, plegarias públicas con exorcismos sin salir de la iglesia para cazar los "besianos seu diablotinos, luysetos becardos!" (Voces coloquiales gálicas (patois) de la época, aludiendo al carácter maligno, perverso y demoníaco de las polillas del racimo). En 1612, el mismo procedimiento es empleado para luchar contra la Piral (Sparganothis pilleriana Hb.) por los viticultores de Colombes donde Monseñor De Gondy ordena en el mes de mayo una procesión alrededor de la iglesia y en los viñedos de los alrededores. En 1746, la Piral arrasa los viñedos de Aï y Romanèche, y es de nuevo a la clemencia divina a la que la población implora para parar los daños. En Troyes y en los viñedos de Champagne, numerosos "procesos" son hechos en el transcurso de los siglos XVI y XVII a la Cochylis

Control Cultural

Las prácticas culturales en el viñedo pueden afectar indirectamente a las poblaciones de L. botrana, bien incidiendo en sus estados de desarrollo, bien modificando su comportamiento. Su efecto es conocido desde años atrás. MARCHAL (1912), observaba que los espolvoreos de los racimos disminuían apreciablemente las puestas sobre los mismos, si bien esto sólo ocurría cuando las hembras se encontraban ante una situación de elección con racimos no espolvoreados. El polvo (azufre, cal) inhibía el reflejo de puesta (ie. al igual que lo observado con el polvo de los caminos), al modificar la superficie lisa de las bayas, pero de no estar disponible un substrato alternativo, la deposición se producía igualmente. VOUKASSOVITCH (1924) ya recopilaba las prácticas culturales que interaccionan con el desarrollo de L. botrana, por su acción directa, o modificadora del microclima:

1) La poda y la conducción de la vid, aconsejando las que facilitan la aireación de los órganos fructíferos.

2) El deshojado, aún practicado en la actualidad en determinadas zonas. Respecto a esta práctica, GONZÁLEZ DE ANDRÉS (1935) sugería que la letalidad de la defoliación sobre la polilla era atribuible a la exposición directa a los rayos solares de los huevos, que acaban desecándose. Además, se hacían más efectivas las pulverizaciones de los racimos (GARCÍA LÓPEZ, 1929; VOUKASSOVITCH, 1924). Consideraciones análogas son extensivas al desnietado.

3) El pinzado y la poda en verde, desfavorables al promover brotaciones vigorosas que encerraban los racimos.

4) El riego, desfavorable bajo ciertas condiciones, al ser atraídos los adultos por la humedad.

5) El amugronado (Ensarmentado o acodado de la vid) y el acollado (Cubrir con tierra el cuello y parte inferior del tronco de las plantas leñosas, en particular de las cepas de vid), aconsejándolas como muy favorables. En este sentido, FEYTAUD (1924) en base a observaciones propias y de otros autores, señala que dichas prácticas culturales favorecen el desarrollo de micosis sobre las crisálidas invernantes en las cepas.

6) La diferente susceptibilidad de las variedades en función de la compacidad de sus racimos, indicando asimismo que los híbridos productores directos eran en general poco atacados.

7) La época de vendimia, al eliminar con la recolección las orugas de tercera generación que no habían abandonado los racimos para crisalidar. En este sentido, GONZÁLEZ DE ANDRÉS (1935) sugería además el adelanto de la vendimia, para reducir la incidencia de la plaga. Éste no es un procedimiento descartable, especialmente si el riesgo de podredumbre es elevado, por la meteorología del año. Sin embargo, si lo que se pretende es una producción encaminada a conseguir un vino de calidad, al menos teóricamente no debería supeditarse la fecha de vendimia a la incidencia de los parásitos y, en cualquier caso, debe buscarse una solución de compromiso.

La destrucción de malas hierbas y malezas circundantes al viñedo, por quemado o alzado, especialmente si estas constituyen hospedadores alternativos (GARCÍA LÓPEZ, 1929), parece una práctica evidente a seguir, pero probablemente de dudosa efectividad.
En conclusión, las prácticas reseñadas pueden tener, en grado variable, una incidencia a valorar sobre las poblaciones de L. botrana, pero en ningún caso han supuesto un medio de control efectivo.

Control Químico

Desde finales del siglo XIX e inicios del XX, el descubrimiento y empleo del pelitre (Nombre vulgar de las plantas Anacyclus (= Anthemis) pyretrum (L.) Link y Chrysanthemum (Pyrethrum) cinerariaefolium (Trev.) Vis. (Compositae), cuyas flores desecadas y trituradas constituían la base de la piretrina insecticida del mismo nombre), supuso un primer freno a las pérdidas catastróficas registradas antaño. Poco más tarde, la aparición del arseniato de plomo (y en menor medida otras sales del ácido arsénico) y de la nicotina, consolidó una incipiente base de protección contra las polillas del racimo, a la que pocos años más tarde se incorporaría también la rotenona (Principio activo con propiedades insecticidas, obtenido de las raices de las plantas del género Derris (Papilionaceae)). Sin embargo, la elevada toxicidad de los preparados arsenicales, cuyos residuos alcanzaban, a veces, niveles intolerables en los vinos, hizo que se reservaran para la primera generación, utilizándose las soluciones jabonosas de nicotina y pelitre en las generaciones estivales (GONZÁLEZ DE ANDRÉS, 1935; GARCÍA LÓPEZ, 1929), todo regulado por una primaria normativa legal en la mayor parte de los países vitícolas (BOVEY, 1966).

Pero es a raíz de la II Guerra Mundial, cuando tiene lugar un enorme desarrollo de la industria química, lo que genera la aparición de los primeros insecticidas orgánicos de síntesis. En 1939 se reconocen las propiedades insecticidas del DDT y de otros organoclorados y un año más tarde aparecen, casi simultáneamente, los primeros organofosforados en Alemania y los primeros carbamatos en Suiza. A partir de aquí, su empleo se generalizaría de tal forma, que tan solo 6-7 años después (1946) se pone de manifiesto la primera resistencia en la mosca doméstica. acción diferente (no neurotóxicos ni inhibidores de la respiración). Señalar los reguladores del crecimiento de insectos (RCI) entre los que se encuentran los miméticos e inhibidores de la hormona juvenil (juvenoides y precozenos); los inhibidores del crecimiento de insectos (ICI) entre los que cabe señalar los inhibidores de la síntesis de quitina y los ecdysoides; y los insecticidas biológicos preparados a base de microorganismos o de sus toxinas.

La lucha química contra L. botrana normalmente se desarrolla como sigue. En primera generación el control es, a menudo, innecesario. Sin embargo en los viñedos en los que las poblaciones son siempre muy elevadas, puede efectuarse un tratamiento preventivo de mayo a inicios de junio. Los tratamientos curativos son también posibles si la decisión de intervenir se toma más tarde y si el seguimiento de la población indica su necesidad. En segunda generación, la lucha es fundamentalmente preventiva, tratando antes de que las larvas penetren las bayas. La lucha curativa es también posible con productos penetrantes, aunque a menudo menos eficaz, al estar las larvas protegidas en el interior de los racimos.



Control Biológico

Se incluyen aquí los métodos de control que se basan en el uso racional y dirigido de los enemigos naturales, empleados hasta la fecha en L. botrana.

El empleo de B. thuringiensis es, en la actualidad, el único método de control satisfactorio de que se dispone. Los primeros ensayos de aplicación, tanto en condiciones de laboratorio como de campo, demostraron ya la efectividad de la bacteria y/o de sus toxinas (ROEHRICH, 1964, 1967a, 1968, 1970a). Esta podía incrementarse por la adición a los preparados de azúcar al 1%, que actuaría como fagoestimulante y aumentando la persistencia, al reducir el lavado del producto (SCHMID et al., 1977; ROEHRICH y SCHMID, 1979). Con las formulaciones actuales la efectividad obtenida oscila entre el 75 y el 90%, e incluso a veces superior. Bajo condiciones meteorológicas favorables, resulta tan efectiva como los insecticidas convencionales (cf. ROEHRICH y BOLLER, 1991).

El control mediante virus no ha sido objeto de investigaciones sistemáticas, por lo que su interés aplicado permanece oscuro. En ensayos de aplicación en condiciones de campo en la ex Unión Soviética, de un virus de la granulosis, Baculovirus orana, se han obtenido, sin embargo, buenos resultados, con una eficacia del 60-100% (CHKHUBIANISHILI y MALANIYA, 1986).
La producción y liberación de Hymenoptera parásitos de huevos (Trichogramma sp.), ha alcanzado el nivel de experimentación en campo en varios países. Las especies con un mayor interés aplicado a L. botrana y objeto actual de estudio, son T. evanescens West., T. cacoeciae Marchal y T. daumalae Dug. y Voel. (BABI, 1990; ROSSI, 1993). Otra especie, Trichogramma (= Oophthora) semblidis Auriv. ha sido citada desde antaño como parásito natural de L. botrana (FEYTAUD, 1913), pero de manera poco específica.
Sin embargo, el método tardará previsiblemente en poder aplicarse, porque quedan por perfeccionar y resolver determinadas cuestiones como, rentabilizar la cría en masa, el control de la diapausa, el mantenimiento del parásito a niveles adecuados en el cultivo, la perfecta coincidencia temporal hospedador-parásito y la optimización de los sistemas de liberación en el viñedo, entre otras.


Control Autocida

El método preconizado por KNIPLING (1955, 1959), para el control de especies con reproducción sexual, aportó una línea novedosa en la protección contra plagas. Se basa, no en incrementar la tasa de mortalidad de la plaga (vgr. insecticidas), sino en reducir la tasa de natalidad, limitando así las explosiones poblacionales del insecto derivadas de su elevado potencial biótico.

Para ello se liberan en el agrosistema a controlar (o producen in situ) individuos estériles y/o portadores de genes letales o subletales, producidos mediante su exposición previa a agentes mutagénicos (rayos gamma y quimioesterilizantes) o genéticamente, mediante cruzamientos interespecíficos. De esta manera, si una cierta proporción de los miembros de la población presenta esterilidad, la capacidad reproductora de la misma declinará, y si la relación entre individuos estériles y fértiles alcanza un determinado valor, la reproducción cesará completamente en un plazo calculable matemáticamente. Es importante señalar que sólo la relación entre los individuos estériles y fértiles en la población, y no sus efectivos actuales, determinará la evolución cuantitativa de la misma.

Condiciones limitantes para la efectividad del método autocida son, 1) la competitividad de los individuos estériles, al menos en un grado igual a los fértiles, 2) la inmigración, 3) que tras el acoplamiento la hembra pierda la receptividad y ovoposite normalmente En este sentido, tanto la poliginia como la poliandria son factores modificadores de la eficacia.

El método autocida se ha desarrollado especialmente, con una eficacia comparable a la del control químico, en Cydia pomonella L. En otras especies de Tortricidae, los resultados no han sido los esperados (Adoxophyes orana F.R., Choristoneura fumiferana Clem.), o no han sido comprobados en condiciones de campo (Zeiraphera diniana Guen., Grapholita molesta Busck), (BUTT, 1991). La aplicación a Eupoecilia ambiguella también ha sido ensayada, pero no se ha desarrollado posteriormente

Control Biotécnico

Aquí se engloban las técnicas que se basan en la utilización de semioquímicos o mediadores químicos en general y de feromonas en particular, para el control directo de plagas (su empleo con fines de seguimiento o prognosis (monitoring) se aborda más adelante). La existencia de las feromonas ya fue presagiada a principios de siglo por FABRE (1904), a raíz de sus experiencias con Saturnia pyri Schiff., hablando de un olor emitido por la hembra que atraía a numerosos machos. La etimología de feromona, según KARLSON y LÜSCHER (1959) se deriva del griego pherein (transportar) y horman (excitar) y son definidas por los mismos autores como sustancias emitidas por un organismo, a menudo mediante una glándula especializada, y que recibidas por un individuo de la misma especie, provocan una reacción específica, un comportamiento particular o un proceso evolutivo. Intervienen en la comunicación a nivel intraespecífico, en oposición a los aleloquímicos, que lo hacen a nivel interespecífico. Estos últimos se dividen usualmente desde un punto de vista ecológico, en alomonas y kairomonas, según provoquen una ventaja en el organismo emisor o receptor de la señal. Según el comportamiento inducido, las feromonas pueden clasificarse en de agregación, de alarma, de dispersión, de marcaje y sexuales.

Son las feromonas sexuales las más profundamente estudiadas y las más interesantes desde el punto de vista aplicado a L. botrana. Pueden ser producidas por los dos sexos, pero en L. botrana sólo se han descrito en la hembra, aunque existen evidencias que señalan su existencia en el macho. Posibilitan la orientación a larga distancia del macho y la localización de la hembra,

Trampeo de masa. El objetivo del método es la concentración de la plaga, mediante el empleo de feromonas, en ciertos emplazamientos donde los insectos son eliminados directamente, mediante insecticidas o capturados en trampas de diferentes diseños. Es especialmente indicado para el control de especies muy dispersas, contra las cuales el control químico es inaplicable. En lo que se refiere a L. botrana recientemente ha sido aplicado en la ex Unión Soviética (PARKHOMENKO y KURBANOVA, 1986) con resultados insuficientes respecto al control insecticida clásico. Una razón que explica la falta de efectividad, es la imposibilidad de disponer una alta densidad de trampas en la superficie a proteger, dado su coste unitario. Asimismo, el gran potencial reproductivo de los machos contribuye a explicar la falta de eficacia del método en L. botrana (TORRES-VILA et al., 1995).

Confusión sexual. El método data de la década de los 60 y fue preconizado por GASTON et al. (1967), por su potencial interés aplicado al control de plagas, derivado del mayor conocimiento y capacidad de síntesis de las feromonas de insectos.


La confusión sexual puede definirse como la perturbación de la atracción sexual de los machos hacia las hembras, provocada por la impregnación del aire de forma homogénea con la feromona específica, difundida a partir de numerosos puntos en el cultivo. La consecuencia es una reducción de la tasa de acoplamientos en la población, que se traduce en generaciones sucesivas, y con un efecto acumulativo, en una fuerte disminución de los efectivos, que permite mantener los daños por debajo de un umbral económicamente aceptable. Ha sido calificado de hiperpreventivo, al actuar no sólo antes de la producción del año, sino incluso antes de su génesis misma. Presenta las ventajas de su inocuidad respecto a la fauna auxiliar, dada su alta especificidad de acción y la eliminación de los residuos de insecticidas. Como contrapartida, requiere que se restablezca un equilibrio ecológico adecuado, para que la fauna auxiliar controle a las plagas secundarias, y el empleo de insecticidas pueda ser suprimido.

La puesta a punto del método de confusión sexual con L. botrana se inició prácticamente tras la síntesis de la feromona y su producción en cantidad suficiente. Las primeras experiencias en laboratorio (ROEHRICH y CARLES, 1977), y en campo (ROEHRICH et al., 1977, 1979; ROEHRICH y CARLES, 1980, 1982), aunque en ocasiones proporcionaron resultados heterogéneos, establecieron los puntos básicos a mejorar para conseguir incrementar la efectividad, fundamentalmente en lo relativo al efecto del diseño, densidad y dosificación de los difusores, zonas de borde, movimiento de adultos, niveles poblacionales a controlar y superficie mínima a proteger. La mejoras técnicas y conocimientos acumulados en los siguientes años, junto con una mejor comprensión del comportamiento reproductor del insecto SCHMITZ (1992), han posibilitado que la efectividad actual sea satisfactoria y al menos análoga a la conseguida con la lucha química (STOCKEL et al., 1992, 1994), observándose además tras un período prolongado de aplicación en campo, su efecto acumulado en el tiempo (pero ver TORRES-VILA et al., 1997a). Las experiencias previas efectuadas en Europa, incluyendo a España, en la que ya ha pasado por una importante fase de experimentación preliminar en varias regiones (cf. VARIOS AUTORES, 1991), ha posibilitado que el método de confusión sexual aplicado a L. botrana se encuentre en fase de homologación.



Control Integrado

La definición de Control Integrado o Manejo Integrado de Plagas (MIP) es tan compleja como su concepto. La FAO lo define (in litt.) como un sistema de manejo de plagas que, en el contexto del ambiente asociado y de las dinámicas de población de las especies plaga, utiliza todas las técnicas y métodos adecuados de una manera lo más compatible posible, y mantiene las poblaciones de la plaga a niveles inferiores de los que producen pérdidas económicas.
Más amplia es la definición de FLINT y van den BOSCH (1981), (in litt.): el Manejo Integrado de Plagas (MIP) es una estrategia de control con base ecológica que se fundamenta en los factores naturales de mortalidad, tales como los enemigos naturales y la meteorología, y que busca tácticas de control que perturben lo menos posible estos factores. El MIP emplea plaguicidas, pero solamente cuando el seguimiento sistemático de las poblaciones de plagas y los factores naturales de control indican su necesidad. Lo idóneo sería que un programa de MIP considerara todas las acciones de control de plagas disponibles, incluyendo la no acción, y evaluara la interacción potencial entre varias tácticas de control, prácticas culturales, meteorología, otras plagas y el cultivo a proteger.


De ambas definiciones surge tanto la necesidad de fijar niveles económicos de daño, como la del seguimiento y prognosis de las poblaciones, para determinar los períodos de riesgo y los momentos de intervención más adecuados.


IVAN FEREIRA
CI:17.579.926
SECCION:B